El Villarreal B sucumbió ante el Barcelona B en el Mini Estadi azulgrana en un gran partido que al final se decantó a favor de los catalanes. Tuvo sus ocasiones el filial amarillo de Paco López antes de recibir el gol, pero no las aprovechó y al final terminó pagándolo. Un trallazo de Dani Romera, nada más arrancar el segundo tiempo, decantó el partido a favor de un conjunto culé que en los dos últimos meses lleva números de equipo de play-off de ascenso. Pudo haber empatado Leo Suárez en el minuto 73, pero la falta que botó se estrelló en el larguero de la portería del arquero alicantino Adrià Ortolà.

Fue un primer tiempo muy bien disputado, pero que terminó sin goles. Dos filiales con una gran propuesta futbolística y eso se tradujo en un bonito espectáculo para los aficionados que asistieron a este encuentro. Fútbol de un nivel superior al que se suele ver en Segunda B. Gustó más el Villarreal B en el primer tiempo. El conjunto de Paco López se mostró serio, ordenado y con las ideas muy claras. Por su parte, el Barcelona B fue mejorando con el paso de los minutos.

Lo poco destacado del primer tiempo salió de las botas de los jugadores vila-realenses y llegaron cuando el encuentro ya estaba cocido. Adentrado en su primer tiempo, llegó la primera ocasión de los amarillos con un pase de Fran Sol a Aitor Cantalapiedra que desde el semicírculo del área engatilló ajustado a la cruceta derecha de la portería de Adrià Ortolá.

Eso en el minuto 30, y en el 36 un centro-chut raso de Leo Suárez se paseó a un palmo escaso de la línea de gol. Con el 0-0 se llegó al descanso. En el descanso Paco López introdujo un cambio. Dejó en el vestuario a Aitor Cantalapiedra y le dio la responsabilidad al cordobés Alfonso Pedraza. Arrancó el segundo tiempo y cuando apenas se habían disputado dos minutos y diez segundos, un pase de Juan Cámara a Dani Romera acabó con un chut potente de éste desde el semicírculo del área que, tras golpear en las piernas de Marcos e Iñiguez, acabó besando las mallas. Los amarillos se veían obligados a remar contra la corriente.

Los azulgranas aguantan

A partir de ahí el filial azulgrana supo jugar con los tiempos del partido. El Villarreal B tuvo mucha posesión, pero escasas ocasiones de gol. Pudo sentenciar Juan Cámara en el minuto 71 con un cabezazo a centro de Dani Romera, pero su remate se estrelló en el larguero que evitó la sentencia catalana. Dos minutos después algo parecido en el área del Barcelona B. Falta en la frontal del área azulgrana. El golpe franco lo ejecutó Leo Suárez y el cuero, tras ser rechazado por Ortolà, impactó en el larguero. El último cartucho de los castellonenses lo quemó el propio extremo argentino en el minuto 90, pero el exarquero amarillo se la detuvo. Fue una lástima no arrancar ni un punto del Mini Estadi. El partido estuvo más que igualado. En ocasiones y en todo, menos en goles.