Manel y sus amigos llevaban un tiempo rumiando la idea: hacer una peña del CD Castellón. Unos iban al Sos Baynat, otros al Porcar, era tiempo de instituto y de anhelos de ascenso a Segunda División B. Una noche, tras una derrota en Castalia ante el Lleida, Manel regresó a casa lamentando la mala suerte del conjunto orellut y escuchando las reacciones en la radio. Ahí se topó, en el cierre, con la canción que alumbró el nombre de Barricada Albinegra. Y es que Emilio Álvaro mediante, las retransmisiones del Castellón se cerraban con En blanco y negro, el popular tema de Barricada.

Una cosa llevó a la otra. Manel se acordó de la canción a la hora del patio, bautizó Barricada Albinegra y fueron pasando los años. Se pasó por Segunda y Segunda División B, por Preferencia y Gol Norte Alto, pero ha sido en el Bajo y en Tercera donde el colectivo se ha hecho fuerte. Lidera el foco de animación más importante de Castalia y es una referencia en los años del dolor y la adversidad. En Barricada, cuanto peor le ha ido al Castellón, mejor ha funcionado su militancia fiel, en una paradoja explicable. El albinegrismo tras la portería germina más por una cuestión de arraigo e identidad que por una perspectiva de éxito. Así se forjan los lazos de la resistencia y así ha ido ganando peso en su mezcla activa de apoyo al equipo y de crítica al palco.

Fundada en 2005, el pasado mes de noviembre la asociación celebró su décimo aniversario. Allí exploró otra de sus características. Programó conciertos y charlas futboleras. Es habitual asimismo el lanzamiento de campañas solidarias. La peña participa, también, en muchos de los tifos que han recibido al equipo en las últimas temporadas y se prepara para afrontar un final de temporada de fuertes emociones.