El «Laqvima Vere», la pasión musical de Vila-real, ultima los preparativos de un evento que se renueva cada año para seguir manteniendo su esencia: la de un espectáculo de gran formato que concita tradición, música, artes escénicas, espiritualidad y una escenografía de vanguardia para consolidarse en el calendario como una de las marcas diferenciales de la Semana Santa vila-realense.

El alcalde de Vila-real, José Benlloch, junto a la consejera delegada de Porcelanosa Grupo, María José Soriano, el concejal de Tradiciones, Pasqual Batalla, y el director de la obra, Alfredo Sanz, presentaron ayer la cuarta edición del espectáculo, que se celebrará el próximo Jueves Santo, a las 21.00 horas, en la plaza Mayor ante un auditorio de unas 2.500 personas.

«El 'Laqvima Vere' es un evento absolutamente consolidado en nuestra Semana Santa, que se ha convertido en estos años en un referente y un hecho diferencial indiscutible de la programación local de estos días. Es, además, un ejemplo de la apuesta que hemos hecho desde el equipo de gobierno por la innovación, canalizando las energías de la sociedad, que en este caso han dado como fruto un espectáculo de vanguardia, con un alto componente cultural y turístico, pero también de sentimiento y de tradición», señaló Benlloch, quien recordó que el evento, impulsado en su concepción actual desde 2013, tiene su principal antecedente histórico en las representaciones de la Pasión documentadas en Vila-real ya en el siglo XV. «Un mensaje de vida que no sería posible sin la implicación de los colectivos y entidades culturales de la ciudad, el esfuerzo de mucha gente, encabezada por Alfredo Sanz, y la apuesta de una empresa como Porcelanosa Grupo».

En la representación del Laqvima Vere intervendrán cerca de 200 personas, en una puesta en escena que este año incorpora importantes novedades. Entre ellas, el estreno de tres piezas musicales, la participación de alumnos de la Escuela Municipal de Teatro y la de Danza o las proyecciones en base a juegos de colores en torno al blanco y el negro como oposición «entre el bien y el mal. No podría existir uno sin el otro», puntualizó Sanz, quien apunta que el espectáculo «está siempre en evolución continua, para incorporar la multitud de registros, matices o personajes que nos ofrece la Pasión».

Para hacer posible este gran espectáculo, la Pasión musical de Vila-real cuenta con la colaboración de entidades como la Coral Sant Jaume, el coro de la UJI, la Unión Musical La Lira, Supramúsica o la Tertúlia Flamenca, además de músicos vinculados con la ciudad y llegados de otros puntos de la provincia y la Comunitat. Como solistas, el Laqvima Vere contará este año con los vila-realenses Vicente Colonques y Francesca Sales, además de Josep Climent, Bonifaci Carrillo y Marga Fernández.