La política laicista del actual equipo de gobierno de Castelló se trasladará a Semana Santa y la corporación municipal dejará de asistir como institución a la procesión del Santo Entierro. Los concejales que quieran participar lo harán a título personal como forma de diferenciar el ámbito público del religioso, según consta en un comunicado que ha trasladado el ayuntamiento a la Cofradía de Santa María Magdalena y que ayer hizo público el portavoz de Castelló en Moviment, Xavi del Señor. «Las manifestaciones religiosas merecen el respeto y deseo que los católicos tengan una Semana Santa espiritual y reflexiva, lejos de injerencias políticas en estas cuestiones tan íntimas y personales», sostuvo en una red social. J. M. castelló