En las pasadas fiestas josefinas, Borriana contó con una afluencia importante de visitantes, algunos grupos de extranjeros que se hospedaron fuera de esta ciudad, pero que disfrutaron de los monumentos falleros y de los edificios modernistas que tiene esta ciudad.

Posiblemente aquella frase que un alcalde de Borriana, pronunció públicamente ante los reyes de España, « Borriana no pide, Borriana ofrece» se practica en muchos aspectos en esta ciudad, hasta la fecha no se ha encontrado la forma de rentabilizar todo lo bueno que tiene esta ciudad. Borriana cuenta con una playa extraordinaria, que mantiene limpia y en condiciones para el disfrute de todos, cuenta con un servicio de vigilancia, cruz roja, buenos accesos y amplias zonas de recreo. Todos estos servicios y atenciones los ciudadanos de Burriana los comparten con el resto de personas que nos visitan durante todo el año.

En la ciudad tenemos una amplia aportación de posibilidades, a parte de las gastronómicas están las arquitectónicas, el modernismo del que solamente nos damos cuenta cuando alguien desde fuera valora positivamente estos edificios, o cuando como ha ocurrido en estas pasadas fiestas falleras que distintos grupos se concentraban delante de estas casas dado el valor que a las mismas corresponde. Durante unos años hemos contado con un Museo de la Naranja, el único museo a nivel nacional, ubicado en una casa importante de Burriana, en la actualidad el museo está cerrado.

En cuanto al modernismo, hay algunas fachadas que necesitan ser restauradas, si los propietarios no están en condiciones de restaurar la fachada, el ayuntamiento debería iniciar alguna gestión para solucionar el problema, no se puede esperar a que se estropeen dado que su recuperación sería más complicada, este patrimonio ya pertenece a la ciudad. En otras poblaciones donde cuentan con edificios modernistas las fachadas se han restaurado, y cuentan con una placa donde se da cuenta del proceso arquitectónico con el que ha contado dicho edificio, así como los nombres de los arquitectos y colaboradores habidos en el momento de realizar la obra. Cuando alguien intenta potenciar Borriana turísticamente, esta propuesta cae como sueño de verano, en la actualidad no hay hoteles, no existe proyectos que apoyar una promoción y los servicios que se ofrecen al público en general no se rentabilizan económicamente en beneficio de la ciudad.