Borriol celebró anoche el acto más esperado de su Semana Santa. Más de 200 vecinos saldrán este Jueves Santo a la calle para interpretar la Pasión Nueva Jerusalén, que este año vivirá su edición número 41. El municipio castellonense recibirá a miles de vecinos y visitantes para presenciar la representación de la Pasión, Muerte y Resurrección de Jesucristo más longeva de la provincia. Nueva Jerusalén podrá seguirse esta noche a partir las 22.00 horas.

Rafael Lloret Teruel, antiguo maestro de escuela que impulsó la Pasión en 1975, vivirá este año la representación como nuevo presidente de Nueva Jerusalén. «Todo el pueblo se junta al lado de una idea», señala Rafael Lloret, que remarca que en Nueva Jerusalén «no hablamos nunca de un espectáculo, sino de una verdadera vivencia». La implicación de los vecinos y el realismo de las escenas son las principales señas de identidad de la Pasión de Borriol.

Para ello, más de 200 actores del municipio han preparado un año más esta multitudinaria representación sobre la pasión de Cristo. «Prácticamente todos los actores son de la segunda generación, y ya viene la tercera. Quedamos pocos de los que empezamos», recuerda Rafael Lloret, que señala que el relevo generacional asegura la continuidad la Pasión de Borriol a través de los años. Un año más, Rafael Lloret Porcar, hijo del presidente de Nueva Jerusalén, hará el papel de Jesucristo.

En espacios naturales

Los integrantes de Nueva Jerusalén refuerzan el realismo de la obra con la representación de escenas en espacios naturales y escenarios acondicionados para que sean lo más real posible. Además, hay escenas que se realizan de manera simultánea, como en la narración original. Otras como la Última cena se desarrollan en secreto. «Nadie sabe donde se celebrará, ni siquiera los mismos apóstoles. Sólo lo sabe Jesucristo y el dueño de la casa», recuerda Rafael Lloret.

Muchos son los vecinos y visitantes que acuden cada Jueves Santo a Borriol para presenciar la representación de Nueva Jerusalén. «No hay espectadores, son todo actores pasivos. Participan con su silencio, compasión y dolor. No existe el aplauso», incide Rafael Lloret. «Todos los años viene muchísima gente», destaca el presidente de Nueva Jerusalén. La representación cuenta la catalogación de Fiesta de interés turístico a nivel provincial.

«La Pasión Nueva Jerusalén es un acto muy importante para Borriol. Le da mucho renombre al pueblo. Se implican mucho vecinos, no solo actuando sino también preparando los escenarios», remarca el alcalde de Borriol, Silverio Tena, que recuerda que «cada año nos visita mucha gente para ver la representación».