Hablar con Sergio Asenjo (Palencia, 1989) es hacerlo con una persona que tiene una capacidad de superación digna de alabar. A sus 26 años el portero del Villarreal CF ya ha superado tres graves lesiones de rodilla, pero sus palabras no transmiten dolor ni pena sino una gran ilusión por seguir trabajando y mejorando.
Pregunta casi obligada, ¿cómo se encuentra?
Bien, feliz. Creo que después de tantos meses, la reaparición en Leverkusen y la continuidad en el partido contra el Barça eran necesarias para mí. A nivel personal, encontrarme tan a gusto después de tantos meses no es fácil y se ve que el trabajo que he venido realizando ha tenido recompensa.
Ahora que ya ha pasado, ¿cómo vivió ese momento?
Al principio con tensión porque son muchos meses de trabajo y, aunque se entrena mucho, la tensión de un partido es diferente. Me encontré bien, con sensaciones muy buenas. Pese a estar tanto tiempo fuera de los terrenos de juego la gente tiene que estar contenta con el Asenjo que vio.
Fueron once meses de mucho trabajo y sacrifico, alejado de los terrenos de juego, ¿cómo se preparó física y psicológicamente?
Por desgracia, en mi carrera me ha tocado vivir más de una lesión y ya sabía por lo que tenía que pasar. Sabía todo lo que tenía que hacer y que había que trabajar siempre con humildad, con ganas de mejorar día a día y sabiendo que podían venir momentos complicados, pero esta tercera vez ha ido todo muy rodado. Hemos dado los pasos que teníamos que dar para que la rodilla fuera mejorando día a día y, a partir de noviembre, ya entré en la disciplina del equipo y traté de que el míster volviera a ver mi mejor versión. Han sido unos meses de mucho trabajo y mucho sacrificio para que la afición del Villarreal pueda ver al mejor Asenjo.
¿Se ha apoyado durante esos meses en Musacchio, que también estuvo lesionado?
La primera fase de mi recuperación la hice en Madrid con mi fisio de confianza, pero en la segunda -de carrera y de campo- ya coincidí con Mateo y nos ayudamos mútuamente. Él, por el estilo de lesión, reapareció mucho antes y, viendo el nivel que está dando y que le ha permitido volver a la selección argentina, se ve que el Villarreal trabaja muy bien.
Su primera lesión de rodilla fue en 2008, la segunda en 2010 y esta última el año pasado, ¿tiene miedo de que le vuelva a pasar?
No, no hay miedo. Esto es un deporte y hay que disfrutarlo. Está claro que estas cosas pasan y lo único es que hay que estar preparado para superarlas. En mi caso puedo decir que lo he conseguido todas las veces y esta vez cuando me sucedió sabía que lo iba a volver a superar. Tarde o temprano el fútbol siempre te da la recompensa y yo la he tenido en una semana mágica para mí.
¿Le ha permitido tomarse con más tranquilidad su regreso viendo los buenos números del equipo y que la portería estaba bien defendida por Areola?
No, porque en una lesión de larga duración no hay que marcarse plazos. Es ir día a día, viendo que la rodilla va mejorando. Pero estoy contento de ver que la portería del Villarreal estaba tan bien defendida tanto por Alphonse (Areola) como por Mariano (Barbosa). El club hizo dos contrataciones fantásticas y se ve en el rendimiento del equipo.
Decía antes que Mateo ha vuelto fuerte y se le han abierto de nuevo las puertas de su selección. Usted se lesionó dos meses después de que le llamara España, ¿cree que puede llegar al mismo nivel que antes de caer lesionado?
Sí, por supuesto. La ilusión nunca hay que perderla. Tengo 26 años y, aunque mucha gente piense que parezco veterano, me considero un portero joven. Sí que he vivido mucho ya pero hay que seguir trabajando, intentar mejorar cada día y, si algún día llega la oportunidad de poder ir de nuevo con la selección, bienvenido sea.
Debutó como profesional en 2006 en dos partidos de Copa con el Valladolid y ya han pasado diez años. ¿En qué se diferencia aquel Asenjo del actual?
En muchas cosas. Ahora soy una persona mucho más madura. Por aquel entonces tenía 17 años y, desde entonces, todo han sido experiencias positivas a pesar de las lesiones. Todo te hace madurar y valorar muchas más cosas que no solo este mundo del fútbol, que a veces pierde la esencia. Creo que ha sido una trayectoria más grande de lo que me podía imaginar cuando debuté y ojalá pueda estar a este nivel otros diez años y seguir disfrutando de este gran deporte como es el fútbol.
Valladolid, Atlético, Málaga y Villarreal. ¿Es el Villarreal uno de los sitios en los que se ha encontrado más cómodo?
Cojo todo lo bueno de los sitios por los que he pasado. Valladolid es mi segunda casa y creo que tengo el cariño de toda la gente cada vez que voy, en Madrid tengo grandísimos amigos aunque deportivamente no estuve todo lo a gusto que hubiera querido y luego tuve una cesión al Málaga que por desgracia no pude disfrutarla por la lesión. Y después de años complicados recibí la llamada del Villarreal, que me daba mucha confianza, y eso se transfiere al campo y creo que llevo tres años fantásticos a pesar de la lesión.
En el Atlético se proclamó campeón de la Liga Europa dos temporadas, ¿le gustaría repetir con el Villarreal?
Creo que la Liga Europa que llevamos está siendo fantástica, eliminando a dos grandísimos equipos como el Nápoles y el Bayer Leverkusen, y ahora nos toca el Sparta de Praga. Vamos a intentar trabajarlo porque creo que si están ahí es por méritos propios. Ahora no hay rival fácil, pero vamos a intentar meternos en semifinales, que sería fantástico para la afición y para el club.
¿Dónde está el techo de este equipo?
Pienso que este año la plantilla está siendo muy humilde y tiene ganas de trabajar y de mejorar. Han venido jugadores contrastados como Bonera o Soldado y creo que han hecho un equipo mucho más experimentado a lo que se ha unido la incorporación de gente con mucha ambición e ilusión. Hay un cóctel muy bueno de jugadores y se está viendo que el equipo cada vez va a mejor.
El calendario se aprieta y van a jugar dos partidos por semana, ¿se ve preparado para arrebatarle la titularidad a Areola?
Desde el primer día que me lesioné esa es mi meta: volver a recuperarme y volver a jugar cada domingo y, si puede ser, cada dos o tres días mucho mejor. He trabajado muy duro y, desde el respeto hacia mis compañeros, he trabajado cada día para demostrarle al míster que estoy preparado. Uno no se puede ganar el puesto de otra manera que no sea trabajando en cada entrenamiento.
Al margen de la portería que está bien cubierta, ¿hay plantilla para aguantar la cuarta plaza hasta final de temporada?
Creo que lo merecemos. Llevamos todo el año allí, trabajando contra grandes equipos con grandes presupuestos y grandes aspiraciones. Nosotros hemos peleado desde el minuto 1 por esa plaza de Champions y nos quedan ocho partidos para acabar la temporada. Ojalá nos salga todo bien y, si estamos al nivel que estamos mostrando todo el año, será esa cuarta plaza nuestra.
