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Castelló ultima la revisión de locales municipales cedidos sin control durante años

El ayuntamiento pretende regularizar la cesión de inmuebles que fueron asignados a asociaciones sin dejar constancia escrita. Plantea que se compartan locales desaprovechados para reducir costes

El equipo de gobierno en el Ayuntamiento de Castelló está ultimando la revisión de locales municipales con el objetivo de poner fin al descontrol que ha reinado durante años en la cesión de inmuebles a asociaciones de la ciudad. En los sucesivos mandatos del PP la asignación de los espacios públicos -bien sean de titularidad municipal o arrendados por el ayuntamiento- ha sido «discrecional», según apuntó ayer a este diario el portavoz municipal, Enric Nomdedéu, quien lamentó «la inseguridad jurídica» a la que se han visto sometidas las entidades sin una concesión regulada del local.

Al asumir la vara de mando a mediados del año pasado, el ejecutivo impulsó una revisión de los inmuebles cedidos a asociaciones de todo tipo: vecinales, culturales o de la tercera edad, entre otras. El inventario, que depende de las concejalías de Participación Ciudadana, Cultura y Bienestar Social, ya está ultimándose y se prevé que esté listo en las próximas semanas. El objetivo es conocer en qué estado se encuentran los locales, qué uso real se hace de ellos y las condiciones de cesión en cada caso.

Hasta ahora el ayuntamiento no imponía criterios objetivos para la asignación de los espacios públicos, sino que dependía directamente de la decisión del concejal de turno. Así, se daban situaciones dispares: el consistorio cedía locales de palabra, sin mediar documento escrito alguno; o asumía los gastos de luz y agua de algunas sedes, mientras en otras eran costeados por los inquilinos. Además, esta discrecionalidad suponía que algunas asociaciones se quedaran fuera del reparto de locales municipales sin una razón objetiva.

El equipo de gobierno trabaja desde hace meses en una normativa que introduzca criterios de cesión y garantice el acceso a las instalaciones públicas en condiciones de igualdad. Se trata de «unas bases que expliquen porqué se da un local a una asociación o porqué no», señaló el portavoz municipal. De esta manera, se están estudiando los requisitos técnicos que deben cumplir las entidades vecinales, sociales o culturales para acceder al uso de un inmueble.

Regular y reducir costes

Paralelamente, con la revisión de los locales municipales se pretende regularizar la situación de entidades que, sin constancia escrita de ocupación, no pueden reclamar en caso necesario el derecho a uso de sus sedes. Por otra parte, se estudia también la posibilidad de que algunas asociaciones compartan espacio, ya que hay inmuebles desaprovechados en los que podrían convivir colectivos vecinales y de la tercera edad. De esta manera, el ayuntamiento también reduciría costes de mantenimiento y arrendamiento.

Cabe recordar que, sólo en alquiler de locales para uso propio y de asociaciones, el consistorio ha venido gastando una media de un millón de euros al año. En concreto, más de medio millón se ha destinado a entidades vecinales, a lo que hay que sumar el gasto de funcionamiento y suministro. Con la regulación de la cesión de locales municipales se persigue establecer un control de los recursos públicos, además de dotar de seguridad jurídica a las asociaciones beneficiarias.

De momento, hasta que no se complete la revisión de locales se desconoce si el ayuntamiento podrá recuperar inmuebles de su propiedad y sacarlos a concurso público. No obstante, si así fuera, las entidades tendrán que cumplir una serie de requisitos que contemplará la futura ordenanza de cesión de locales. La normativa establecerá todos los detalles de la relación contractual entre el ayuntamiento y las asociaciones inquilinas, tales como la asunción de gastos de mantenimiento o los seguros.

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