El entrenador del Villarreal, Marcelino García Toral, empezó ayer por la tarde a preparar al equipo de cara al objetivo del «doblete» de clasificarse para la próxima edición de la Liga de Campeones y hacer coincidir este objetivo con la disputa de una final continental como sería la de la Liga Europa.

El submarino es cuarto de la Liga española con cinco puntos de ventaja sobre el quinto clasificado -el Celta de Vigo- y está en cuartos de final de la Liga Europa, en los que se medirá al Sparta de Praga los próximos 7 y 14 de abril.

Hasta el momento, el equipo villarrealense nunca ha conseguido aunar ambas circunstancias en las dos ocasiones en las que ha tenido la posibilidad de hacerlo, por esos los futbolistas del cuadro de la Plana Baixa se han conjurado para hacer historia.

Y es que en los dos precedentes que han existido, el Villarreal sí garantizó su clasificación para una competición continental, pero no fue capaz de acceder a la final del segundo torneo europeo, en el que tantas ilusiones tiene depositadas.

La primera ocasión en la que los villarrealenses tuvieron esa posibilidad se dio en la temporada 2004-05 con Manuel Pellegrini como entrenador el equipo, que era tercero con 50 puntos y afrontaba los cuartos de final con el AZ Alkmaar. Al final, el submarino llegó a clasificarse para una nueva edición de la Liga de Campeones, pero cayó ante los holandeses en la eliminatoria europea.

Lo mismo sucedió en la temporada 2010-11, en aquella ocasión con Juan Carlos Garrido como entrenador del Villarreal, cuando el equipo era también cuarto a estas alturas del campeonato doméstico y también le esperaban los cuartos de final con el Twentee holandés en el torneo europeo de aquella temporada. En aquella ocasión, el Villarreal logró alcanzar la tercera plaza de la clasificación y con ello logró una plaza para la Liga de Campeones, pero cayó en semifinales de la Liga Europa con el Oporto.

Este año, en la presente temporada, el conjunto amarillo tiene ante sí una nueva ocasión de romper con las estadísticas y escribir una nueva página en su historia. Los futbolistas del cuadro villarrealense afrontan con mucha motivación el tramo final de la competición doméstica y, más aún, la eliminatoria de cuartos de la Liga Europa contra el Sparta de Praga después de haber eliminado a dos huesos como eran el Nápoles y el Bayer Leverkusen.