El Villarreal CF dejó escapar con vida al Sparta Praga de El Madrigal. El conjunto amarillo dominó el encuentro de principio a fin y dispuso de las mejores ocasiones, pero falló más de la cuenta y acabó dejando la eliminatoria abierta y por decidir la próxima semana en la República Checa.

Muy pronto se le puso de cara el partido al conjunto amarillo porque no habían transcurrido ni tres minutos cuando Bakambu aprovechaba un grave error del meta Bicik al despejar un balón dentro del área para batirle y establecer el 1-0. Había que estar en el momento adecuado y el lugar oportuno y el delantero del Villarreal no dudó en presionar al portero rival, encontrándose con un tanto de rebote que les ponía por delante.

A esta primera jugada le siguieron al menos otras tres muy claras del submarino de forma consecutiva que podían haber dejado el partido visto para sentencia. Sin embargo, los lanzamientos de Mario, Castillejo y de nuevo Bakambu quedaron en nada.

El Villarreal tenía el control del balón y generaba peligro de forma constante. Estaba consiguiendo romper la defensa del Sparta Praga una vez tras otra, pero sus futbolistas parecían no tener la puntería demasiado afinada.

Siguió intentándolo el cuadro villarrealense por medio de Soldado con un potente remate de cabeza que acabó en las manos de Bicik; de Bakambu con un doble remate que acabó marchándose fuera y con otro chut de Castillejo a pase de Denis Suárez.

Y, ya se sabe, hay un tópico en el fútbol que dice que «quien perdona lo acaba pagando» y eso es precisamente lo que le pasó al Villarreal en el último minuto de la primera parte. En un lanzamiento de esquina, los futbolistas amarillos no defendieron bien la jugada y vieron cómo Brabec batía a Asenjo con un potente cabezazo sin tiempo, además, para tratar de reponerse del mismo.

Se había pasado de poder disfrutar de una goleada de escándalo a tener que afrontar el segundo tiempo en busca como mínimo de un gol que volviera a igualar la contienda de cara al partido de la vuelta la semana que viene en la República Checa. La tuvo Mario en la primera jugada de la reanudación pero su lanzamiento golpeó el travesaño. Por suerte, instantes después apareció otra vez Bakambu para meter de nuevo a los suyos en el partido con su segundo gol de la noche tras un gran pase de Denis Suárez.

El Villarreal se quitaba así parte de la presión, el nerviosismo y la ansiedad acumuladas durante la primera parte y afrontaba el resto del partido con el objetivo de marcar un nuevo gol que le diera más tranquilidad de cara al partido de la semana que viene.

No varió demasiado el guión respecto a la primera parte ya que, aunque el rival checo parecía sentirse más cómodo y si generaba más peligro en jugadas a la contra, el submarino seguía teniendo el control. Marcelino dio entrada a Baptistao y Adrián López en busca de ese anhelado tanto, pero ni con ellos pudo conseguir su cometido y la eliminatoria se decidirá en Praga.