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Convivencia en la calle y deterioro urbanístico

La zona de Tir de Colom cuenta con el área de esparcimiento canino más grande de Castelló El óxido está presente en gran parte de la fachada del Instituto Politécnico

Convivencia en la calle y deterioro urbanístico

El distrito sur de Castelló es un pequeño pueblo dentro de la capital de la Plana, en el que cada vez se dan más servicios para la ciudadanía que le permiten, fundamentalmente, poder disfrutar de dotaciones educativas, culturales, sociales y de ocio al igual que el resto de la ciudad. El amplio barrio que integra Tir de Colom puede presumir de disponer de nuevos espacios abiertos, ampliamente demandados por los vecinos, y de numerosas infraestructuras educativas que suponen para las familias tener al alcance de su mano colegios e institutos sin tener que desplazarse a otras partes del municipio. Eso no oculta, en cualquier caso, que sean numerosas las deficiencias y el deterioro esté presente en algunos puntos del barrio.

Uno de los edificios que está pidiendo a gritos un lavado de cara es el Instituto Politécnico, en el parque del Oeste, uno de los centros educativos con más actividad del municipio, en el que se imparten clases de secundaria, bachillerato y ciclos formativos. El Politécnico ha pasado por numerosas etapas, que se remontan a hace casi 80 años, cuando se puso en marcha al amparo de un Real Decreto que activaba las enseñanzas profesionales. Primer fue concebido para dar Artes y Oficios Artísticos, aunque se añadirían con posterioridad las de tipo industrial. Durante muchos años estuvo en un ala del instituto Francisco Ribalta, hasta que en 1966 se trasladó al actual emplazamiento del parque del Oeste.

Este edificio fue derribado en 2001 y se construyó el que conocemos hoy, inaugurado en 2003. Trece años después, el paso del tiempo ya comienza a sacar a la luz el óxido acumulado por toda su fachada, lo que hace preguntarse si fue acertado este diseño exterior y si alguien se preocupa por darle un lavado de cara y buscar una solución definitiva a una situación que da una imagen de deterioro total.

El barrio, en cualquier caso, sobresale por sus amplios espacios al aire libre, concentrados muchos en la vecina calle de Maestro Arrieta, que disfruta de la mayor zona de esparcimiento canino de la ciudad, con más de 2.000 m2.

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