El conseller de Educación, Vicent Marzà, dejó claro ayer cuáles son los límites de la escuela concertada: «hay que tratar con los mismos criterios a todos los centros que cuentan con fondos públicos». A preguntas de los asistentes al desayuno informativo celebrado en el Casino Antiguo de Castelló, el titular de Educación señaló que «aquellas escuelas concertadas que respondan a una necesidad de escolarización no tendrán problema, pero las que no, no podrán continuar».
Además, manifestó sin tapujos su opinión sobre los centros que segregan por sexo, como los dos colegios concertados de Betxí: «No pensamos que sea una educación buena en pleno siglo XXI, creemos que la sociedad está formada por diferentes personas, ideologías y géneros y, por tanto, lo lógico es que convivan también en las aulas». No osbtante, reconoció que la conselleria tiene las manos atadas a la hora de actuar en este sentido, ya que la Lomce blinda este tipo de enseñanza.
Por otra parte, sobre el modelo plurilingüe, Marzà señaló la necesidad de «dominar de forma efectiva el castellano y el valenciano» y abrió la puerta a expandir el plan piloto que ya desarrollan seis colegios en la Comunitat Valenciana: «El modelo plurilingüe debe llegar a todos lo centros, y los alumnos deben dominar el inglés y conocer una cuarta lengua», añadió.
Respecto a la posibilidad de implantar la jornada continua en los centros escolares, el conseller reiteró que será decisión de la comunidad educativa en cada colegio. Para cambiar el horario, debe haber «demanda social», señaló, y un proyecto pedagógico que permita reestructurar el funcionamiento del centro.
