Representantes del consistorio de Castelló se reunieron ayer con el cónsul de Francia en Valencia, Pablo Broseta, «para estrechar la colaboración entre ambas instituciones», explicó durante el día de ayer el ayuntamiento en comunicado.

Broseta planteó al ayuntamiento la conveniencia de ceder el uso de alguna instalación o despacho municipal para que periódicamente, aproximadamente cada dos meses, personal de la Agencia Consular de Valencia se desplazara hasta Castelló para atender los trámites de los franceses residentes en toda la provincia. El cónsul explicó que el objetivo es «facilitar las gestiones y evitar que tengan que desplazarse hasta Valencia».

La alcaldesa, Amparo Marco, valoró «positivamente» la propuesta y se compromete a buscar una ubicación para poder facilitar este servicio. La propia Marco recordó los «importantes» vínculos que han existido entre Castelló y Francia, «país al que emigraron en su día muchos castellonenses». De hecho, la provincia de Castelló es la segunda de toda España, después de la de Jaén, que cuenta con mayor número de vecinos que trabajaron en algún momento de su vida en Francia. Por otra parte, dentro de la provincia, las tres ciudades con más residentes franceses son la capital de La Plana, la Vall d'Uixó y Vila-real.

Broseta insistió en que Castelló es «absolutamente prioritario» para el gobierno francés porque la colonia de franceses residentes en la provincia «es muy importante». Aunque tienen registrados a unos 7.000, sus estimaciones duplican esta cantidad, ya que «mucha gente no se inscribe hasta que lleva mucho tiempo aquí».

Broseta, además, ofreció la colaboración de la agencia consular para promocionar en distintos puntos de Francia los atractivos turísticos de la capital de la Plana. También se comprometió a impulsar relaciones bilaterales económicas para atraer inversiones.