El vicealcalde de Castelló y portavoz del gobierno municipal, Enric Nomdedéu, no pudo ocultar ayer su malestar con Castelló en Moviment, socio externo del ejecutivo, al que acusó de desleal. Todo después de la comparecencia de los concejales de la agrupación de electores instando al gobierno a regularizar la situación catastral de los edificios municipales cedidos a empresas para que paguen el IBI. Nomdedéu lamentó que Castelló en Moviment trasladara una imagen falsa de que los impagos son generalizados «y de que aquí no se mira a nadie, cuando eso no se ajusta a la realidad». Por ello, consideró que no ha sido leal con el gobierno bipartito.

Nomdedéu manifestó también que el sistema asambleario de Castelló en Moviment obstaculiza las relaciones entre el ejecutivo y su socio, ya que algunos de los acuerdos alcanzados en el seno del ayuntamiento son rechazados luego por la asamblea. «Igual no la representan», disparó el vicealcalde.