La Unió de Llauradors i Ramaders denunció ayer que las reducciones fiscales para los agricultores y ganaderos de la provincia de Castelló de este año «son absolutamente ridículas y además dispares para los agricultores y ganaderos castellonenses».

La Unió ha exigido al Ministerio de Hacienda a través de un escrito que «rectifique de forma inmediata la orden para que recoja la realidad fiscal agraria castellonense del 2015» y solicita «a todos los ayuntamientos afectados y a los partidos políticos de Les Corts que muevan ficha y contribuyan a este objetivo».

Según la organización agraria, con carácter general únicamente hay reducciones para todos los términos municipales de la provincia de Castelló por lo que se refiere a cultivos de cítricos, olivo, tomate, cereales y almendra de secano. En cuanto a ganadería para las explotaciones de bovino de leche, carne y cría en extensivo de bovino, cunicultura, apicultura, porcino de carne y cría en extensivo y ovino y caprino de carne y leche en extensivo. En ganadería se continúa así con la discriminación hacia el sistema de integración (casi exclusivo en nuestra provincia), como es el caso del porcino (segundo sector en aportación a las cuentas agrarias valencianas después de los cítricos) y el de pollos de engorde, que continúan con índices de rendimiento elevadísimos del 0,56 y 0,42, respectivamente.

Estas reducciones generalizadas se vuelven a bajar en función del cultivo y localidad y es aquí donde el ministerio establece, añadieron las mismas fuentes, una disparidad en la tributación y «por tanto, un agravio que provoca pérdida de competitividad entre agricultores de pueblos cercanos que cultivan el mismo producto, lo que demuestra que la rebaja fiscal se ha hecho sin pies ni cabeza». «Sólo 21 localidades de un total de 135 en toda la provincia tienen esa reducción específica, lo que representa únicamente el 16% del total», resaltaron.

Para el cultivo del olivo, continuaron desde la Unió, no hay disminución en ninguna localidad de la provincia ni tampoco para el de la cereza del Maestrat. En cítricos, según la entidad, mientras los productores de Borriana o Nules van a tener un índice específico del 0,18, en localidades vecinas como Vila-real o Les Alqueries sus agricultores van a tributar el 0,22 que es la reducción general para toda la Comunitat. Otro ejemplo es el de la alcachofa donde los productores de Benicarló, Vinaròs o Càlig tienen un ajuste del 0,13 al 0,18 y en Peñiscola no hay rebaja.

Ramón Mampel, secretario general de la Unió, señala que «esta rebaja fiscal crea agravios comparativos entre agricultores según su lugar de empadronamiento y cultivo».