Una resolución aprobada ayer por el Parlamento Europeo en contra de la concesión del estatus de economía de libre mercado a China refuerza a la industria cerámica de Castelló, que reclama que se prolonguen las medidas proteccionistas con el gigante asiático por competir en unas condiciones de competencia desleal.

La propuesta acordada recibió el voto a favor de las principales fuerzas políticas de la Eurocámara, como el Partido Popular Europeo, el Partido Socialista Europeo, la Alianza de los Liberales y Demócratas Europeos y los Verdes. Hubo 546 votos a favor, 77 abstenciones y 28 en contra. La iniciativa supone un espaldarazo para los intereses de la industria europea, cuyas patronales y sindicatos se han movilizado en contra de la consideración de China como economía de libre mercado. La Comisión Europea ya ha finalizado un periodo de consultas para decidir sobre el futuro de las importaciones chinas, pero tras la resolución de ayer, que fue respaldada por los partidos que sustentan la mayoría de gobiernos de la UE, todo apunta que el Ejecutivo comunitario prolongará la política proteccionista con China.

El gigante asiático persigue esta declaración esgrimiendo que su pacto de adhesión a la Organización Mundial de Comercio (de 2011) fija su incorporación como economía de libre mercado en diciembre de 2016. La Eurocámara sostiene que la OMC rebate que son los estados los que establecen los criterios para su inclusión y que en el caso de la Unión Europea sólo «ha cumplido una de las cinco condiciones».

Asimismo, el Parlamento Europeo (PE) insta a la UE a seguir con una metodología «no estándar» en las investigaciones de «subsidios antidumping» en la comparativa de precios. El actual sistema de análisis- se compara el precio de otro país diferente a China para que no sea infravalorado -desaparece en diciembre, y el PE indica que la normativa permite continuar con el método que ahora se lleva cabo.

En paralelo, la resolución hace hincapié en la necesidad de reformar los instrumentos de defensa comercial de la UE «para garantizar la igualdad de condiciones entre la industria europea y China». Se trata de correctores que incrementan los valores de los aranceles ya existentes. Entre otras herramientas proteccionistas se encuentran las medidas «antidumping», que se activan en importaciones de un país cuando se constata tras una investigación que son subvencionadas y que venden a precios más baratos que los de los costes de producción. De los 77 expedientes abiertos, 58 corresponden a China.

Desde 2011, la UE aplica el «antidumping» a las importaciones cerámicas. En septiembre finaliza su vigencia pero si se comprueba que la situación sigue igual se alargarán.

La eurodiputada del PSOE, Inmaculada Rodríguez, que preside el Foro de la Industria Cerámica en el Parlamento, considera que las medidas de defensa comercial necesitan una actualización. Explica que las «antidumping» contemplan una investigación muy lenta. Estados Unidos, afirma, aprueba medidas a las importaciones de un país en el momento que se inicia una investigación. Lamenta que hay países de gobiernos liberales de la UE que bloquean este cambio.