El Villarreal B se enfrentará a la UD Logroñés en la primera eliminatoria de la fase de ascenso a la Liga Adelante. El partido de ida se disputará el próximo domingo en el campo Las Gaunas (18.30 horas) y la vuelta, siete días después en el Mini Estadi. Si el filial amarillo de Paco López supera esta primera ronda, el lunes 30 volverá a estar en el sorteo para decidir los emparejamientos de la segunda eliminatoria. El filial evitó ayer cruzarse con uno de los cocos del bombo como era el Cádiz de Álvaro Cervera. Los otros enfrentamientos entre segundos contra cuartos fueron: Toledo-Real Murcia, Lleida-Barakaldo, Cádiz-Racing Ferrol y Tudelano-Hércules.

Un ex del Villarreal C en el rival

La UD Logroñés, cuarto del grupo I de Segunda B, disputará su segunda fase de ascenso a la división de plata desde que se fundó en 1967. Está entrenado por Carlos Pouso y ha sido un equipo muy irregular en las últimas jornadas del campeonato liguero. Cuenta en sus filas con un ex del Villarreal C, y durante una década en el fútbol base amarillo, como es el lateral zurdo burrianense Quique Ferreres, quien llegó en enero procedente del Mallorca B. En sus filas están los goleadores Pere Milla (18), Iker Alegre (7) y Carlos Fernández (6).

Si para la UD Logroñés será la segunda fase de ascenso, para el Villarreal B también. En la primera eliminatoria el rival fue el Zamora. El partido de ida fue en el campo Ruta de la Plata y allí los amarillos pusieron pie y medio en la siguiente ronda al vencer por 0-2. Aquel partido se jugó el 15 de mayo de 2009 y en él Javi Matilla y Berodia (en propia portería) anotaron los goles. Siete días después, en el Mini, se afrontó la vuelta. Y se ganó (2-0), gracias al acierto de Chando y Joan Tomás, este de penalti.

Segundo intento amarillo

En las semifinales el rival fue el Lorca Deportivo. La ida se disputó en el Mini el 31 de mayo. A pesar de dominar claramente, los vila-realenses vencieron por la mínima (1-0) con gol del experimentado Gerard Bordás. En la vuelta, disputada en el nuevo campo Francisco Artés Carrasco, hubo goles y mucha emoción, y triunfo amarillo (2-3). Por los lorquinos llegaron dos goles de Manu Busto y por los de la Plana Baixa hubo doblete para Cristóbal Márquez, más otro de Joan Tomás, de penalti.

En la final a doble partido, la ida se jugó en El Madrigal ante 13.000 aficionados pero no se movió el marcador (0-0). Todo quedaba pendiente para siete días después en la Nueva Victoria. Lleno a rebosar en el campo y 36 grados de temperatura. La cosa no pudo empezar peor ya que muy pronto Esparza puso el 1-0. El campo casi se vino abajo. Los nervios se adueñaron de los locales que poco a poco fueron engullidos por el Villarreal B. Empató Gerard Bordás y la grada enmudeció. Luego anotó Chando y aquello se convirtió en un funeral.