El interés de los ciudadanos por las Fuerzas Armadas ha crecido en los últimos años, así lo reflejan las cifras de jóvenes que anualmente presentan su solicitud para alistarse en el ejército. De hecho, la última convocatoria, del pasado enero, cerró con cerca de 100 solicitudes en la provincia de Castelló. Este interés, según explica el subteniente Roda, se ha mantenido constante en los últimos años y espera que se mantenga al cierre de la nueva convocatoria, que se publicó en el BOE el pasado 21 de mayo, y en la que se ofrecen más de 900 plazas para oficiales y suboficiales en diferentes secciones de las Fuerzas Armadas.

Desde la subdelegación de Defensa de Castelló asocian este progresivo y constante aumento de las solicitudes para alistarse en el ejército al hecho de que los ciudadanos valoran «de forma muy positiva» el trabajo de esta institución. De hecho, insiste el subteniente, «desde hace un par de años, es uno de los organismos mejor valorados». Este factor ha sido determinante y ha tenido mayor peso en el aumento de solicitudes en el ejército que otros aspectos como la elevada tasa de desempleo entre los jóvenes o la estabilidad y condiciones de trabajo que ofrece el ejército.

Y es que, tal y como insisten desde subdelegación de Defensa, el proceso de oposición exige una amplia y concreta preparación, que aunque varía dependiendo del cuerpo, únicamente superan los candidatos que realmente están motivados y les mueve una verdadera vocación militar.

En lo que se refiere a las mujeres, también se ha visto acentuado en las últimas décadas el interés por las Fuerzas Armadas.

Hasta el año 1988, más de diez años después de que se celebraran las primeras elecciones democráticas en España, no se autorizó que las mujeres formaran parte del ejército. Con todo, en las cerca de tres últimas décadas, la institución se ha sometido a una profunda transformación en la lucha por la igualdad de derechos entre hombres y mujeres, según apuntan desde subdelegación Defensa.

De hecho, en la provincia de Castelló esta evolución por la integración de la mujer en el cuerpo se ha visto reflejado en un mayor interés de ellas y un amento de solicitudes, que llegaron a suponer el 10% del total, al cierre de la última convocatoria.