La exposición del colectivo Trashformaciones ubicada en el casco urbano de Borriana y en la casa de cultura la Mercè cuenta con toda clase de opiniones. Algunos ciudadanos, tras considerar los elementos, utilizados de chatarra se atreven posteriormente a bautizar las obras expuestas con nombres adecuadamente al oficio que tienen. Los agricultores consideran que la obra ubicada en el Pla, es un «cremaor», comparándolo con los que seguramente tendrán en los huertos. Los cinco vehículos completamente planchados que hay delante del ayuntamiento, para algunos ciudadanos es el entierro del tradicional SEAT 600 y el que está en el interior de la Mercè el del «mirall». Esta obra compuesta por un vehículo colgando del techo y una balsa de aceite de motor de vehículo, en la balsa se tiran monedas de céntimo por ver si realmente es aceite o un espejo.

La falta de costumbre de ver este tipo de exposiciones es sin duda alguna la que lleva a este cambio de opiniones en su mayoría radicales, más aún si alguien intenta hacer creer que estas obras son definitivas, que se van a quedar en la ciudad y recuerdan aquellos años en que el Ayuntamiento de Borriana adquiría esculturas tras el pertinente concurso y las ubicaba en distintos lugares de la ciudad.

Lo realmente importante de esta muestra, que sin duda alguna tiene más detractores que otra cosa, es la movilización que lleva a cierto sector de ciudadanos a censurar cualquier actitud que no esté dentro de los márgenes establecidos por estos mismos ciudadanos.

Personalmente, de lo que está expuesto admiro la forma de trabajar, la imaginación para sacar partido de un material de chatarra que por lo menos tiene la facilidad de aportar polémica en una ciudad en la que la cultura popular está resurgiendo poco a poco pero con proyección de cara al futuro.

Esta población cuenta con extraordinarias instalaciones para desarrollar culturalmente cualquier actividad y en los últimos años se ha trabajado para la infraestructura. Ahora lo que se está consiguiendo es la utilización de estas instalaciones.

Una vez puesto en materia cultural recuperar el Museu de la Taronja, poner en funcionamiento e inaugurar el museo del Cardenal Tarancón, que esté cerrado todo esto es algo que solamente entienden aquellas personas que no han cumplido con lo que en su día prometieron tras invertir en obras.