Importante victoria y amplia renta la conseguido por el Almazora de Iván Medall en la ida de la primera eliminatoria de ascenso a Tercera frente al Calpe. Importante triunfo para disputar la vuleta que se cimentó en la seguridad defensiva y en la lucha y el pundonor que derrocharon durante todo el partido los albinegros ante un equipo como el alicantino que se mostró muy correoso, pero que sólo creó peligro en jugadas de estrategia y a balón parado. Los de la Marina Alta apenas realizaron jugadas de ataque con verdadero poderío ofensivo que, salvo mediante la circunstancia arriba reseñada, no crearon prácticamente problemas a la portería defendida por Raúl Martinez.

En la primera parte, los almazorenses encarrilaron pronto el partido ya que tras una jugada de toda la delantera local un buen pase de Pepe Castell lo culminó Fandos en el minuto 8 para conseguir el primer gol que abría la lata defensiva visitante.

A partir de aquí, los pupilos de Medall intentaron ampliar el marcador, pero la fortaleza defensiva de los alicantinos, que lo fiaron todo a los córners, y las escasas faltas que el árbitro pitó complicaron el penalti. La mejor y única ocasión del Calpe llegó en una jugada de la delantera a la media hora de partido en la que un lío en el área almazorense pudo haber propiciado el empate, pero se conjuró el peligro al despejar con apuros un defensor local cuando, con Raúl desbordado los delanteros visitantes fueron incapaces de rematar entre una nube de jugadores.

Se incrementa la ventaja

En la segunda parte los almazorenses siguieron luchando mucho y pusieron mucha pelea y rigor ofensivo en su búsqueda de ampliar la ventaja en el marcador. El juego de los de Medall se basó en una férrea defensa y en el dominio del centro del campo para que les pudiera dar oportunidades de acercarse a la portería visitante. Tras una buena jugada de ataque,Andrés conseguía en el minuto 67 el segundo gol ante el delirio de la afición local. A partir de aquí siguieron los locales buscando ampliar el marcador, mientras los alicantinos sólo siguieron creando peligro a balón parado , sin crear apenas peligro en jugadas estrictamente ofensivas.

Las claves del buen resultado obtenido por el Almazora se encontraron en la gran seguridad y sobriedad defensiva mostrada y la capacidad para anular el peligro ofensivo del equipo contrario. Pero habrá que dejarse de euforias de cara a la vuelta ya que este equipo en su terreno de juego no dejará de ser temible, la respuesta en 7 días en la vuelta en tierras alicantinas.