Ni el Castellón quería al Atlético Malagueño ni el filial del Málaga quería a la escuadra de la capital de la Plana. De hecho, los castellonenses querían evitar cualquier equipo filial como rival pero el sorteo del lunes deparó este encuentro que el domingo a las 19.00 horas vivirá la ida en el Castalia. Desde tierras malagueñas su técnico, el barcelonés Manel Ruano, que se estrena esta temporada con la escuadra blanquiazul, dijo de el conjunto albinegro que «es un equipo muy diferente al mío», destacando que cuenta en sus filas «con jugadores de mucha más categoría que la Tercera. Gente contrastada».

Al igual que dijo el lunes el entrenador del Castellón, Kiko Ramírez, no se querían cruzar los unos con los otros. «Es el rival más complicado que había. Un histórico del fútbol español. Al Málaga en su día también le costó mucho salir de Tercera, pero salió. Afortunadamente jugaremos en un campo grande, de los que nos gusta jugar», aseguró el preparador del Atlético Malagueño. Además, comentó que «tenemos ganas de jugarlo y esperanzas de pasar a la fase final».

Manel Ruano confesó que «esperaba un rival más asequible», pero advirtió que «es lo que toca. A partir de ahora adversarios fáciles no hay. Todos los que han llegado aquí tienen su nivel», por lo que apostilló que «hay que ser optimistas en hacer un buen partido allí en Castalia, sabiendo que luego siempre nos quedará la vuelta en nuestro campo y ante nuestra afición».

Manel Ruano fue jugador del Gramenet, donde se inició, Atlético de Madrid B, Atlético, Rayo, Levante, Mérida, Córdoba, Málaga y Castelldefels.