El estudio, publicado en la revista médica The Lancet Diabetes & Endocrinology, sugiere que muchas directrices actuales sobre salud que recomiendan reducir grasas y calorías generan una percepción errónea sobre los efectos de la ingesta de grasas de la dieta mediterránea, de reconocidos beneficios para la salud, según informó la UJI. El artículo está firmado por los expertos Ramon Estruch, de la Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud de la Universitat de Barcelona y el Hospital Clínic; Emili Ros, del Hospital Clínic de Barcelona y el IDIBAPS; Rosa M.ª Lamuela, de la Facultad de Farmacia de la UB, y Xavier Pintó, de la Facultad de Medicina y Ciencias de la Salud de la UB y el IDIBELL, entre otros expertos de instituciones y centros hospitalarios de todo el Estado, entre las que se encuentra la UJI. Las evidencias científicas de este trabajo apuntan a que el contenido total en lípidos no es un indicador adecuado para valorar los efectos negativos o beneficiosos de los alimentos. Así, las grasas de los frutos secos, del pescado y aceites vegetales ricos en compuestos fenólicos son más saludables que los lípidos procedentes de la carne y alimentos procesados.