El alcalde de Vila-real, José Benlloch, denunció ayer la campaña de «mentiras y difamación» puesta en marcha por el Partido Popular local en la serie de vídeos 'Vila-real en un minut', difundidos por los populares en las redes sociales en plena campaña electoral. En concreto, Benlloch se ha referido al último de estos vídeos, en los que el PP asegura que «Benlloch pretende perdonar 750.000 euros a un banco a cambio de dos pisos de lujo», algo que, señala el alcalde, «no sólo es completamente falso, sino que constituye una auténtica campaña de difamación contra mi persona, porque está expresado para confundir a la ciudadanía y hacer daño». Ante estos hechos, el primer edil anuncia que ha dado traslado del vídeo a los servicios jurídicos para emprender las acciones legales oportunas «contra las mentiras y la difamación del PP».

Al respecto, añade que «no vamos a tolerar que sigan con su campaña de difamación y, por eso, vamos a emprender las acciones legales que sean necesarias». Benlloch insta a los populares a «aclarar qué intereses están defendiendo con la difusión de este tipo mentiras y manipulando en un tema tan delicado como la necesidad de vivienda; hay que tener muy poca vergüenza para manipular en un tema que, además, es otro más de los empastres que nos encontramos cuando asumimos el gobierno municipal en 2011», lamenta Benlloch.

Para el alcalde, esta «campaña de difamación» pretende «tapar los hechos más graves que han sucedido en este ayuntamiento», en alusión al caso Piaf, empresa investigada en la trama Gürtel de financiación ilegal del PP que habría facturado 600.000 euros en facturas falsas en la última etapa de gobierno municipal popular; facturas anuladas por Benlloch y que ahora investiga un juzgado de Vila-real».

A propósito de las «mentiras» contenidas en el vídeo, el alcalde recuerda que fue el PP el que dio licencia para construir una finca de pisos, con 76 viviendas, 11 locales y 228 plazas de paking, en un almacén protegido por el PGOU en la plaza del Labrador, «agrediendo el patrimonio de todos». «Cuando asumimos el ejecutivo local, el empastre ya estaba hecho y, además, se había construido una piscina fuera de licencia».

Desde entonces, el criterio, según asegura, ha sido «no conceder licencias de ocupación y tratar dar solución al empastre; una solución que en todo caso pasará por intentar obtener, de forma legal, pisos para la ciudad que palien la falta de vivienda social que tenemos tras 16 años de gobiernos del PP que prefirieron despilfarrar en bibliotecas sin libros que invertir en derecho a la vivienda». En ningún caso, insiste Benlloch, «se ha hablado de perdonar ninguna multa, si es que la hubiera. Lo único que se ha hecho, con el apoyo de la exconsellera del Partido Popular Isabel Bonig, es proceder a la descatalogación del inmueble para intentar regularizar la situación», detalla Benlloch.