Muchos de los actuales aficionados del CD Castellón no tuvieron la suerte de celebrar el último ascenso del conjunto albinegro a Primera División. Hoy se cumplen 27 años de aquella inolvidable tarde del 18 de junio de 1989 cuando la escuadra de la capital de la Plana capitaneada por el incombustible Luiche consiguió el punto que le hacía falta para certificar el cuarto ascenso a la máxima categoría de la entidad castellonense. Un rotundo 0-0 en El Plantío contra el Burgos y directos a la Primera División.

Fue una temporada, la 1988-89, en la que el CD Castellón se puso el mono de trabajo en la segunda vuelta y certificó el ascenso. En ese período disputó 19 partidos saldados con 12 triunfos, cinco empates y sólo dos derrotas. Se armó en Castalia donde únicamente dejó escapar dos puntos. Y llegó la fecha decisiva del 18 de junio cuando tocaba arrancar un punto, o los tres, en Burgos, para no jugárselo todo en la última jornada en el nuevo Castalia contra el Castilla (al que se goleó por 6-0, por cierto).

Once histórico

Arropados por muchos seguidores en El Plantío, el Castellón formó con Emilio Isierte, Bonhoff, Javi Valls, Alfredo, Alejandro, Escobar, Viñals, Puskas (Manchado), José Hurtado, Pepe Mel (Víctor Salvador) y Raúl Cruselles.