El Joventut Almassora militará la próxima temporada en la Segunda División (grupo VII) después de una brillante temporada en la Liga Autonómica, en la que el equipo entrenado por Ángel Víctor Adamuz quedó primero, tras ganar veintiuno de los veintiséis encuentros disputados, más dos empates y sOlo perder en tres ocasiones. Las chicas de la escuadra almassorense fueron un máquina de hacer goles con 111 materializados y únicamente encajaron 20.

Dentro de esa gran cantidad de goles, destacaron cuatro jugadoras. La más efectiva fue Iris Domínguez, que firmó 28 goles. Le siguieron futbolistas como la lanzaroteña Gara González o la porteña Sara Llinares. Y pocos goles encajados gracias al gran trabajo realizado por las porteras que más minutos han acumulado esta temporada: Mireia Clemente y Judith Valerio.

Un club joven

Este plantel pertenece a un club fundado en 2013 y que esta temporada tuvo diez equipos compitiendo, dos de ellos femeninos. Su presidenta es Magdalena Rodríguez. El equipo gualdinegro ya trabaja del histórico estreno en categoría nacional, donde tendrán como compañeros de viaje a otros clubes de la Comunitat Valenciana como es el caso del Ciudad de Benidorm, Mislata, Villarreal B, Elche, Levante B, Sporting Plaza de Argel, Valencia B o Aldaia. La Segunda División es el paso previo a la máxima categoría femenina.

Después de una temporada de ensueño, donde solo se perdieron tres partidos (dos ante el Villarreal B por 1-0; más otro contra el Calpe por 1-0), toca planificar la próxima temporada. El club de la Plana Baixa ha empezado a renovar jugadoras. Las primeras en hacerlo han sido Gara González, Sara Llinares, Judith Valerio e Isabel Pascual. De la misma manera habrá nuevas incorporaciones.

Los primeros fichajes del Joventut Almassora son Anna Lizárraga y Laia Ballesté, ambas procedentes del Tortosa-Ebre, junto a la tarraconense Laia Díaz, que llega del Levante Las Palmas, y la ferrolana Jessica Rego, que aterriza en Castelló procedente del Elche.