El penalti que falló Antonio en Gavà, el que valía un ascenso, asoma de vez en cuando difuminado en la retina, pero el descontento de la afición albinegra con los rectores del CD Castellón, en especial con el presidente David Cruz, continúa presente. El malestar florece de diversas formas y en diferentes momentos. Una de los palpables motea las calles y los muros de la capital de la Plana. Cada mañana, Castelló despierta con múltiples mensajes de disconformidad con la situación del club. La acción poética albinegra llena paredes de pinturas y propaganda. El colectivo Barricada Albinegra, el más numeroso en el pulmón de Gol Norte Bajo (GNB), comparte cada jornada los resultados en su cuenta de Twitter.

«Cruz, fora de Castàlia», «Cruz dimissió» o «Cruz no, futbol negoci tampoc» son algunos de los lemas visibles en las paredes de Castelló. A las pintadas se unen pósters y comunicados.

Soluciones

A principios de semana, con la firma de Fanàtics GNB, que reúne a diferentes colectivos de aficionados, vio la luz un comunicado crítico con la gestión del actual consejo, que reclamaba la «financiación transitoria de las instituciones públicas, que tenga como finalidad una verdadera democratización del club. Sólo de esta forma se podrá dar a las socias y a los socios la oportunidad de tener poder de decisión». En ese sentido, el texto señalaba como ejemplo «el proceso similar experimentado por el Levante UD, con resultados muy positivos».