La provincia de Castelló, como también el conjunto del país, sufre año tras año las consecuencias de los incendios, sobre todo durante los meses de verano, que es cuando el clima es más seco y las temperaturas más altas. De hecho, estos sucesos se han convertido, junto al fenómeno de la gota fría, en el principal desastre natural que ha venido padeciendo Castelló. Aunque en las últimas décadas ha crecido la conciencia social sobre este tipo de sucesos, con campañas de concienciación, promovidas por las administraciones públicas, y la aplicación de novedosos mecanismos de prevención y extinción del fuego, lo cierto es que estos sucesos siguen siendo frecuentes y sus efectos devastadores. Cada incendio que arrasa la provincia deja en evidencia que los esfuerzos en la prevención de estos incidentes deben continuar.
Eusebio Moro, ecoemprendedor e inventor de Castelló, ha sido una de las personas en el país que más ha investigado precisamente sobre este fenómeno. Conscientes del fatal impacto del fuego en el territorio, y del constante riesgo al que está sometida la provincia, Moro y su equipo comenzaron a investigar este suceso y trataron de plantear soluciones que simplificaran la gestión de los incendios en Castelló.
Con este objetivo inventaron unas esferas con espuma, ignífugas y biodegradables, que facilitarían el apagado de los incendios de forma más eficiente y con menos riesgos, ya que el sistema permite lanzar estas bolsas desde helicópteros, a cierta distancia, o incluso, en el caso de trabajos de extinción nocturnos, desde una catapulta localizada en un perímetro próximo al incendio.
Las cápsulas que se lanzarían, de dos metros de diámetro, estarían compuestas por un compuesto acuoso con un agente químico y otras sustancias que explotarían cuando estuvieran sobre el fuego. Según detalla el inventor de Castelló, se trata de un sistema más económico y eficiente del que sigue en este momento en la Comunitat, y en prácticamente todo el país. A pesar de que este invento no ha logrado los suficientes apoyos en Castelló y no se ha podido poner en práctica en la provincia, han sido varios países del mundo los que se han interesado en esta novedosa iniciativa, como es el caso de Estados Unidos y México.
Hoy Eusebio Moro se reúne con unos inversores de Madrid interesados en la compra o explotación de esta patente. El inventor espera que las negociaciones lleguen a buen puerto y que finalmente esta solución se ponga en práctica.
