El derribo de los antiguos cines ABCD de Rafalafena ya es un hecho. La empresa Demmero, impulsora del centro deportivo que se alzará en las viejas salas , ya tiene la licencia para iniciar la construcción del edificio. La firma valenciana confirmó ayer que el Ayuntamiento de Castelló ha dado luz verde al proyecto que hará desaparecer uno de los cines más emblemáticos de la ciudad. Tanto es así que, esta misma semana, han iniciado los trabajos de demolición del viejo edificio. Algo ampliamente deseado por los vecinos que en varias ocasiones habían mostrado su malestar por el deterioro de la estructura y el deplorable estado en el que se encuentra la zona. Ahora, confían que este complejo deportivo mejore el barrio.

Para la obtención del permiso de obra, el consistorio ha tenido que ejecutar un cambio de uso del suelo (uso deportivo) y que afecta a la parcela ubicada entre el número 37 de la calle Rafalafena y el número 2 de la calle Villavieja. La solicitud se presentó formalmente en el consistorio a mediados de octubre y la licencia se aprobó hace unas semanas y, a continuación, se concedió el permiso de demolición. Todavía se desconocen los plazos de ejecución que determinarían a partir de qué fecha los castellonenses podrían disfrutar de estas nuevas instalaciones.

En el lugar se prevé levantar un complejo deportivo bajo techo en el que no se descarta una piscina, área de fitness y salas polivalentes, proyectos similares a los que la firma Demmero gestiona actualmente, como son el complejo deportivo Patacona y Alfafar, ambos en la provincia de Valencia.

El proyecto se conoce precisamente cuando se van a cumplir siete años del cierre de unas salas que estuvieron en marcha durante más de una década tras abrir en 1996. Los ABCD Rafalafena tienen el honor de ser los últimos cines de barrio de la capital de la Plana. Con cuatro pequeñas salas, en su primera etapa recibió el apoyo de los vecinos. La crisis que afectó de lleno a finales de los 90 acabó por reducir de forma notable el número de espectadores y le abocó al cierre.