Luismi Ruiz se marchó sin levantar polvareda. Se fue con lágrimas en los ojos porque «quería jugar otra fase de ascenso y subir con el Castellón, y celebrarlo como el que más con esta gran afición». Pero con la llegada de Frank Castelló su situación cambió. «Con este técnico no me sentía importante en el equipo y creo que me lo gané la temporada pasada. Me esperaba más confianza de su parte», dijo en esRadio Voramar. El nuevo mister fichó a Abraham Peleteiro para su posición. j. f. roca