La Confederación de Empresarios de Castelló ha decidido constituir en la junta extraordinaria celebrada hoy una gestora integrada por cinco personas tras la dimisión del presidente, José Roca, y sus vicepresidentes. Ha convocado el 18 de agosto una asamblea general para validar una gestora de la que forman parte Carmelo García (transporte), Vicente Cuevas (transporte de viajeros), Néstor Pascual (Fepac), Juan Vicente Bono (Asebec) y Maite Balada (asociación de mujeres empresarias de Castelló).

Esta dirección colegiada se prolongará hasta que se clarifique la situación financiera de la CEC, que adeuda 600.000 euros a las entidades financieras. Queda pendiente la convocatoraria de las elecciones internas. Al respecto,la patronal presentará en breve un preconcurso de acreedores. Este proceso contempla un plazo de cuatro meses para solucionar los problemas económicos. Si transcurrido el mismo prosiguen los impagos, la CEC entraría en concurso de acreedores y su gestión quedaría en manos de un administrador concursal.

La patronal confía en cobrar entre septiembre y octubre 600.000 euros que debe el Consell en cursos de formación, unos retrasos que la CEC había recurrido ante el contencioso.

De secretario general permanece de momento Rafael Montero, el hombre fuerte de los 29 años de presidencia de Roca. Entre el empresariado piensan que espera el despido para cobrar su indemnización.