La concesionaria del aeropuerto de Castelló, SNC-Lavalin, ve en el mercado nacional otra fuente potencial de tráfico, de ahí su interés en abrir rutas que conecten con puntos del territorio español. Las negociaciones con las aerolíneas locales no han llegado a buen puerto, por lo que ha establecido contactos con compañías foráneas para abordar nuevas conexiones. El gestor aeroportuario está a la espera de la respuesta de una aerolínea alemana a la que ha ofrecido enlazar Castelló con otros destinos nacionales.
La instalación dispone de tres líneas regulares que unen con destinos extranjeros (las dos británicas de Ryanair y la rumana de Blue Air), a las que se incorporará una cuarta en septiembre (la conexión con Bulgaria, también de Ryanair). La concesionaria confía en incrementar estas líneas internacionales y, en este sentido, ha hecho un ofrecimiento a Ryanair para que refuerce la actual oferta de vuelos y ponga en marcha nuevos destinos. De forma paralela, negocia la apertura de alguna ruta en España, un mercado que no quiere descuidar, ya que el turismo de Castelló es mayoritariamente nacional.
Las gestiones realizadas con aerolíneas españolas no han frutificado. Durante años, la valenciana Air Nostrum mostró su interés en operar en Castelló e incluso anunció vuelos con Madrid y Barcelona. Sin embargo, la reestructuración de la compañía le hizo cambiar de planes y ahora descarta a corto plazo crear enlaces regulares con la base de Vilanova-Benlloch.
Ante el desinterés de los operadores nacionales, SNC-Lavalin rastrea el mercado internacional. De hecho, ha presentado una propuesta a una aerolínea alemana para que ponga en marcha vuelos dentro del territorio español. El ofrecimiento está en fase de estudio y espera una respuesta en las próximas semanas.
Competir con Manises
La principal dificultad que se encuentra el concesionario a la hora de captar compañías es la proximidad del aeropuerto de Valencia, al que es difícil arrebatar tráfico pese a que operar en Castelló es hasta un 50 % más barato. De hecho, las tarifas aeroportuarias son el principal reclamo de SNC-Lavalin, que ofrece importantes descuentos a las aerolíneas.
Por otra parte, hay que determinar qué conexiones podrían ser rentables. La de Madrid está descartada por la competencia de tren. En estos momentos, el trayecto en AVE entre Castelló y la capital de España se cubre en 2 horas 55 minutos y con la finalización de las obras del corredor se reducirá en media hora. Con esos tiempos, es inviable plantear una ruta aérea Castelló-Madrid. Como tampoco parece plausible un enlace con Barcelona, ya que en un futuro el tren de alta velocidad también unirá ambas capitales.
En su día también se plantearon vuelos con Baleares. Estas rutas podrían crear tráfico en el aeropuerto, pero no canalizarían turistas para la provincia, ya que el grueso de los usuarios serían castellonenses de visita a las islas.
La gestora de la instalación necesita generar más actividad para cumplir sus objetivos. Este año confía en alcanzar los 120.000 pasajeros con las rutas que están en marcha. El gran salto ha de darse en 2017, en que se ha marcado el reto de los 240.000 viajeros. Para 2020 espera llegar a 500.000 para superar la barrera del millón en 2025. Cumplir estos objetivos será una misión complicada.
