El Ayuntamiento de Castelló y la Junta de Festes intentan rebajar la tensión tras varios meses de enfrentamiento, pero parece que la entidad festera todavía no ha puesto fin a sus cuitas internas. Una nueva crisis asoma en la Junta, ya que varios miembros del equipo de Juanvi Bellido insisten en presentar su dimisión por diferencias irreconciliables con el presidente.

La decisión de estos vocales no está cerrada, pero indican que probablemente su marcha se formalizará la próxima semana. Se produciría pocos días después de que el Patronat de Festes haya confirmado la propuesta de reestructuración de la Junta. Bellido la había planteado varios meses atrás y el ayuntamiento había decidido aplazarla ante el desfase económico registrado en la pasada Magdalena. La nueva Junta de Festes está compuesta por 22 personas, 12 integradas en el equipo de gestión y 10 en el equipo de colaboración. Lidón Barberá ha asumido la vicepresidencia primera y Fernando Torrent la vicepresidencia segunda. José Iturralde continúa de persona de confianza de Bellido como coordinador.

El actual presidente de la Junta tomó posesión el 17 de octubre de la presidencia de la Junta de Festes al vencer a Jesús López con un mensaje de renovación. En este tiempo se han registrado seis bajas de vocales, a las que hay que sumar las destituciones de José Miguel Rebollo y Ana Alegre, quienes se significaron en el sector crítico de Bellido.

A partir de la semana que viene podrían materializarse entre dos a tres renuncias, lo que evidencia el malestar de parte de la Junta con la gestión de su presidente.

Por su parte, el ayuntamiento prepara un refuerzo de los medios en el Patronat para mejorar el control económico y de contrataciones en fiestas y evitar los desajustes registrados en las pasadas celebraciones. La Junta sólo podrá programar.