En el último pleno ordinario y como ya viene siendo de costumbre, volvimos a sentir el tono desagradable y despreciable de la concejal de Hacienda, Sandra Albiol.

Socialistas Peñíscola, ante unos datos oficiales del Ministerio de Hacienda gobernado por el PP en referencia al período medio de pago de las facturas del Ayuntamiento de Peñíscola y sin nosotros/as contrastar la información, ya que eran datos oficiales estatales, no dudaron en compartirlos y decir que eran datos que reflejaban la mala gestión del equipo de gobierno. De los errores se aprende y sin contrastar información, por nuestra parte no volverá a suceder, así que pedimos disculpas por ello.

Ante nuestra actuación, la concejal de Hacienda aludió ante mi persona y en el pasado pleno ordinario, me acusó de que me alegraba (no me conoce) de que esta hipotética situación fuese verdadera. Me indicó, entre otras cosas, que le habría tenido que consultar dicha información en la playa del Pebret, lugar que coincidimos el domingo antes del pleno. Mi respuesta: dichas cuestiones técnicas no eran para consultarlas y contrastarlas ni en ese momento ni en ese lugar.

La respuesta de ella con la ayuda del señor Martínez para rematar: en pocas palabras, que si no soy concejal los 365 días, por el motivo anteriormente referenciado. Os lo tendré que perdonar, ya que se deben confundir con no tener una dedicación exclusiva.

Decirle, por si no se ha enterado aún, que me siento y me voy a sentir concejal de Peñíscola y de toda su población durante esta legislatura, recordarle que no me dedico de forma exclusiva como ella. Comentarle para que lo sepa, que en mi tiempo libre, fines de semana, largas noches, incluso en mi jornada laboral, SÍ que me dedico a mi pueblo. Me han llamado peñiscolanos, peñiscolanas (que los hay y muchos), visitantes y les he atendido lo mejor que he podido con mis limitados recursos y así lo seguiré haciendo el día que Peñíscola decida hacerme alcaldesa.

El señor Alcalde alude a «mi tono y postureo» en mis intervenciones; mi pregunta es: «¿Cómo tiene la poca decencia de intentar dar lecciones de mi tono, si tiene a la concejal de Hacienda, que pleno tras pleno nos habla como si fuésemos ignorantes de la situación de nuestro pueblo? ¿Postureo?, Porque si postureo es intentar mejorar Peñíscola realizando una labor de oposición crítica pero también constructiva, que baje Dios y lo vea. Usted, señora Albiol no tiene vergüenza de decir que me alegro yo, por la mala situación del Ayuntamiento de Peñíscola. ¿Qué sabe usted? ¿Qué dice? Entiendo que le moleste mi presencia, mi forma de hacer política y mis notas de prensa pero usted no es nadie para cuestionar el sentimiento que tengo por mi pueblo, para mí, eso es faltar al respeto y a la persona que sacrifica su vida personal y profesional, sin necesidad alguna (a diferencia de usted) y ante todo a la persona que ama de forma incondicional y da la cara por su pueblo. Sí, esa soy yo: Isabel Esbrí Navarro. Con sus alusiones ante mi persona, en el pleno anterior, solo puedo decirle una cosa: no tiene vergüenza.