El conseller de Educación, Vicent Marzà, anunció ayer que la Generalitat está buscando suelo para poder construir un colegio en el barrio de Raval Universitari de Castelló con el objetivo de poder dar respuesta a las familias que, este año, no han podido escolarizar a sus hijos en los dos centros con los que, actualmente, cuenta el barrio. Marzà aseguró — en el acto de celebración del XXV aniversario de la Universitat Jaume I que tuvo lugar ayer en Castelló— que el Raval Universitari «tendrá escuela» y que la construcción de la misma está incluida en el plan de infraestructuras. «Ahora estamos viendo de qué manera lo podemos agilizar», añadió.
Asimismo, el responsable de Educación hizo hincapié en que todos los niños han sido escolarizados en función de los criterios de admisión y que los colegios a los que han sido adscritos «están alrededor del barrio, no están lejos de su territorio». No obstante, «también se trabaja en soluciones» para que los alumnos que se tengan que desplazar fuera del barrio «puedan llegar con mayor facilidad a los centros que les han correspondido», añadió.
Cabe recordar que los hijos de alrededor de veinte familias del Raval Universitari se han quedado sin plaza en los centros educativos del barrio, el CEIP Vicent Marzà y el CEIP Manel Garcia Grau, ante la alta demanda en la etapa de Infantil. Según los padres afectados, se trata de un problema que arrastran desde hace varios años por lo que urgen la creación de una nueva línea que facilite la escolarización de sus hijos en la escuela más próxima a sus domicilios.
A este respecto, Marzà criticó la «nefasta planificación» del Partido Popular que «ni dejó espacio para construir escuelas, ni las construyeron en un barrio nuevo con mucha gente joven y, ahora, van ahí a hacerse una foto como si fueran a solucionar las cosas». «Nosotros, en un año, lo que estamos haciendo es dar solución a tantos pufos que han dejado, entre ellos una planificación nefasta de ese barrio», agregó.
Por todo ello, el conseller de Educación criticó la actitud «cínica» del PPCV al exigir una solución para los alumnos del Raval Universitario cuando ellos «no planificaron nada ni construyeron escuelas».
Por otro lado, Marzà, aseguró que el recurso de la Universidad Católica de Valencia ante el Tribunal Superior de Justicia por excluir a los alumnos de las universidades privadas de las becas del Consell supone un «ataque» contra los estudiantes de la universidad pública. «Si hubieran querido incluir a sus estudiantes, lo hubieran hecho de manera que no se paralizara la adjudicación de las becas a la pública y lo que han pedido es que se paralice todo», aseguró. Marzà indicó que no entiende esa actitud «porque es ir contra la pública, por lo que lo que les hemos dicho es que retiren ese recurso y que presenten los que quieran si quieren defender que se incluya a los alumnos de la privada y que diga un juez».
Por último, Marzà también hizo referencia a la ley en cuanto a los exámenes de reválida y aseguró que se aplicará pero buscarán la manera de que se produzca el «menor daño posible» para la comunidad educativa. «Somos la inmensa mayoría los territorios los que le decimos al ministro de Educación que no tienen sentido esas reválidas, y no solo porque tengan efecto académico o no, sino porque no tiene sentido que para poder titular la ESO haya que hacer un examen cuando ya evalúan los profesores durante todo el curso», concluyó.
