La sociedad que gestiona los residuos urbanos de la franja central de la provincia, Reciplasa, ya tiene listo el plan que dará salida durante 20 años a la basura de 44 municipios castellonenses. El próximo viernes se dará luz verde al ambicioso proyecto inversor, que tiene como elementos destacados la apertura de un nuevo vertedero en Onda y la construcción de una planta de transformación de residuos en combustible.
El área de Reciplasa (que abarca localidades de la Plana Alta, l'Alcalatén y Alto Mijares, con una población conjunta de 365.000 personas) se quedó en 2014 sin un basurero de referencia al cerrar el de Onda. En los dos últimos años, el rechazo (unas 70.000 toneladas anuales) se ha tenido que derivar a las instalaciones de Algímia d'Alfara y Cervera del Maestre, con el consiguiente sobrecoste económico.
Reciplasa ha redactado el nuevo plan de gestión con las líneas maestras para los próximos años. Será expuesto ante el consejo de administración el viernes. Tal como avanzó este diario, prevé la construcción de un nuevo vertedero en Onda, en terrenos situados juntos a la actual planta de tratamiento. El objetivo es que el basurero, con una capacidad de unos 90.000 metros cúbicos, esté operativo dentro de tres años. Además, está prevista la reapertura del vertedero de Tales, aprovechando que cuenta con todos los permisos ambientales, aunque tendrá una función auxiliar.
El plan de Reciplasa contempla una considerable reducción del rechazo, esto es, de los residuos que van a parar al vertedero, que en la actualidad suponen un 44 % del total. Se conseguirá a través de la modernización de la planta de tratamiento de Onda y la de transferencia de Almassora. La joya de la corona será la futura planta de combustible sólido recuperado (CSR), que se construirá de forma paralela al vertedero. Esta instalación transformará parte del rechazo en un producto (el CSR) con elevado poder calorífico que puede ser utilizado por la industria como fuente de energía. El objetivo es que, en pocos años, el porcentaje de rechazo se rebaje al 15-18 %. Europa marca que a partir de 2030 sólo podrá ir a vertedero el 10 % de los residuos. u envío a Onda.
La futura planta de CSR tendrá capacidad para producir 100.000 toneladas anuales. El problema es que Reciplasa no tiene garantizada una salida comercial para este producto. Este es el motivo por el que se ha paralizado el proyecto, pese a que llegó a colocarse la primera piedra en 2012. El único acuerdo al que ha llegado es con una empresa del sector cerámico ligada a Pamesa dispuesta a asumir más de 20.000 toneladas anuales. Esta firma será pionera en la utilización de CSR para su transformación en gas de síntesis (syngas), obteniendo así una fuente de energía alternativa al gas natural. Reciplasa confía en que no sea la única y la demanda se incremente paulatinamente.
El proyecto de Reciplasa contempla un importante paquete de inversiones y los municipios deben acordar el ritmo de ejecución de las mismas. Onda seguirá como centro de gestión de los residuos del centro de la provincia en Onda, ya que albergará la planta de tratamiento, la fábrica de CSR y el vertedero de rechazos. A cambio, el municipio recibe compensaciones y sus vecinos disfrutan de uno de los recibos de basura más económicos. Además, será el principal beneficiario de los nuevo puestos de trabajo.
