El Ayuntamiento de Castelló y la Junta de Festes ponen fin al enfrentamiento protagonizado en el primer ejercicio festero e inician una nueva etapa tras la elección del nuevo gerente del Patronato, cuyo nombre satisface en teoría a ambas partes. La concejala de Festes, Sara Usó, ha optado por una persona muy vinculada a la fiesta como Vicente Montolío y descarta el perfil técnico que caracterizó a la anterior responsables. Con esta decisión pone a una persona con autoridad en el «món de la festa» y que es bien vista por la propia Junta.
El principal objetivo del ejecutivo local con la elección de Montolío, que en su día fue prohom de la Germandat dels Cavallers de la Conquesta, es evitar que se produzcan las fricciones que caracterizaron el devenir del último ejercicio festero y, sobre todo, el desfase presupuestario registrado durante la pasada edición de las Fiestas de la Magdalena. Tanto la Junta como el Patronat se estrenaron a finales de 2015 y activaron una nueva estructura festera, por la que el organismo municipal asume la administración económica y la Junta mantiene la parte organizativa.
Esta doble función generó tensiones entre ayuntamiento y la Junta de Festes.
Sin embargo, con Montolío al frente del organismo festero, el equipo de gobierno espera que las relaciones mejoren, así como coordinación entre ambas entidades.
Tareas administrativas
Según fuentes municipales, Montolío respetará la autonomía de la Junta y se centrará en la parte administrativa. En ese sentido, su función será la de validar las contrataciones de los actos diseñados por la Junta. Subraya sus conocimientos sobre el entramado festero, así como su perfil profesional, ya que es funcionario del Hospital Provincial de Castelló y licenciado de Ciencias del Trabajo por la UJI. Además, contará con más plantilla en el Patronat.
Su primera misión al frente de la entidad será la de promover los nuevos pliegos de condiciones que regirán los concursos para las contrataciones de 2017. Para la pasada Magdalena no dio tiempo a redactarlos por falta de tiempo y en las adjudicaciones hubo tensiones entre el presidente de la Junta, Juanvi Bellido, y el Patronat.
Al finalizar Magdalena, el Ayuntamiento de Castelló culpó a la Junta de Festes de generar un desfase de 251.000 euros con gastos imprevistos. La Junta se defendió y alegó al respecto que fueron partidas que el propio Patronato validó.
Este desvío fue el momento culmen del episodio de división entre el gobierno municipal y el máximo organismo festero. Entre medias, Bellido afrontó un juicio por una denuncia de una funcionaria del Patronat por presuntas amenazas, del que finalmente salió indemne.
Finalmente, el ejecutivo viró al ser consciente de que esta polémica estaba erosionando su trabajo en fiestas y de que no tenía potestad para impulsar posibles cambios en la Junta. Ahora, asume la realidad de la Junta y se afanará en garantizar una correcta gestión del sistema festero.
