El Ayuntamiento de Castellón ha evitado en un año 189 cortes en el suministro de agua a 166 familias en situación de vulnerabilidad, «un dato que avala la necesidad de mantener el programa de lucha contra la pobreza energética y garantizar una respuesta rápida a las familias que se encuentran en una situación de emergencia social», según confirmó ayer la alcaldesa de Castelló, Amparo Marco, después de la Junta de Gobierno Local haya dado luz ver a la renovación del convenio suscrito con Facsa para ayudar a las personas en situación de exclusión social.
El concejal de Bienestar Social y Dependencia, José Luis López, destacó que en el primer año de vigencia «se han atendido prácticamente el 100% de las solicitudes recibidas, que han supuesto una aportación económica de 21.359 euros». El ayuntamiento, a través de Servicios Sociales, evalúa en cada solicitud las circunstancias de necesidad que han generado el riesgo de suspensión del servicio y se determina si procede la concesión de ayudas de emergencia.
