El Villarreal CF ha puesto en marcha la segunda edición del proyecto «Endavant Igualtat», destinado a discapacitados y gente con problemas y que se convierte «en uno de los más importantes y de mayor calado», según afirmó ayer el presidente del club, Fernando Roig.

El proyecto contempla que los jugadores de la cantera, desde el filial hasta el infantil, se relacionan con gente de su edad o más mayor y que tienen otras problemáticas más duras y más graves que las de un joven futbolista. Con ello cada equipo apadrina a una asociación o un centro de educación especial de la provincia con el que colabora.

El vicepresidente José Manuel Llaneza afirmó que un club tiene que «ser solidario, tiene que ayudar a los más desfavorecidos, a la gente que necesita de ayuda». «Tenemos la obligación de hacer futbolistas, pero sobre todo la de hacer personas y que sea gente que aporte mucho a nuestra sociedad», agregó Roig. El club colabora con centros como CEEM La Bartola, Asociación Aspropace, Fundación Síndrome de Down Castellón, Centro Autismo CAU, Centro de Reeducación de menores Pi Gros, Residencia Tercera Edad Virgen de Gracia, Centros de Acogida Plana Alta y Plana Baixa, Centro Creixem y AUPA.