El Athletic remontó ayer en San Mamés a la Real Sociedad (3-2) y acabó con su mala racha en el más clásico de los derbis vascos, un choque ante el vecino donostiarra que el conjunto bilbaíno llevaba sin ganar cuatro temporadas y ochos encuentros. El equipo de Ernesto Valverde se vio rápido por debajo en el marcador, por un gol de David Zurutuza superado el cuarto de hora, pero en la segunda mitad encontró el talento de Iker Muniain y Aritz Aduriz combinado con un grieta en la salida de balón visitante para dar merecidamente la vuelta a un choque que pareció dejar visto para sentencia Iñaki Williams con el 3-1 pero al que dio vida Iñigo Martínez con el 3-2 a diez minutos del final.

Por cierto, los tantos de Muniain, Aduriz -que ya lleva cinco en liga- e Iñigo Martínez, golazos merecedores de verse repetidamente. Con este triunfo, el Athletic fortalece su posición europea y queda a un solo punto de la Liga de Campeones y a tres del liderato. La Real, por su parte, perdió la ocasión de auparse a la parte alta de la clasificación y permanece en mitad de la tabla casi a la misma distancia del descenso como de Europa.

Tres tarjetas en los once primeros minutos, a Aduriz e Iñigo Martínez en una disputa verbal entre ambos y a Raúl también por hablar, ya avisaron lo caliente que se avecinaba un derbi que se le puso de cara a la Real con el 0-1 en el minuto 16 tras un córner. A pesar de su dominio durante la primera mitad, el Athletic esperó hasta la segunda parte para voltear el marcador. En un cuarto de hora Muniain y Aduriz encontraron dos espléndidos golpeos que dieron la vuelta al resultado y al partido. El pequeño extremo se preparó un gran disparo desde la frontal con una de las diagonales que tanto buscaba antaño; y el ariete batió a un descolocado Rulli con un toque sutil. Con el 3-1, la Real encontró vida con un gran cabezazo de Iñigo Martínez, que puso el 3-2 final.