Concejales del grupo municipal del PP, Cibur y Ciudadanos de Borriana abandonaron ayer una reunión sobre la modificación del PGOU después de que el edil de Urbanismo, Bruno Arnandis, pusiera en duda que debía tratarles como personas, como indicaron en un comunicado. Mientras la oposición se despedía de un técnico municipal que deja su puesto en el consistorio, cuando fueron increpados en un tono elevado por el presidente de la comisión, Arnandis, que les exigió que abandonaran la sala o dejaran las despedidas para otro momento. Los regidores reprocharon el tono amenazante utilizado exigiendo que tuviera «educación» y les tratara «como personas», a lo que el edil espetó que dudaba «que fueran personas» y por ello se fueron.