Este será el último curso en barracones para los alumnos de Primaria de Borriana, sin que por ello olvidemos que durante dos décadas, los alumnos de este ciclo educativo en la localidad no conocieron el colegio como tal hasta que por la edad pasaron al instituto, y vivieron la enseñanza con mayores comodidades. El nuevo colegio llevará el nombre del Cardenal, Vicente Enrique i Tarancón y sirve a los gobernantes para dar un reconocimiento más al insigne borrianense.
El tiempo enseña o nos ayuda a comprender el porqué la ciudadanía tiene tantas dudas en las promesas electorales, aquellas que nos llegan de palabra o en panfletos y que por casualidad van junto a la foto del candidato el cual nos acerca las necesidades que tienen los ciudadanos y la voluntad del político en el cumplimiento de las mismas. Por mucha voluntad que hayan podido tener quienes nos han gobernado en los últimos diez años no pudieron cumplir su promesa de terminar con los barracones en esta ciudad. El nuevo colegio era ya una necesidad y cuenta con una línea menos y algunas instalaciones deportivas que estaban grafiadas en la obra que ya no se realizará. Posiblemente este sea el principal motivo de que la obra actual tenga un coste inferior al primer proyecto, otras especulaciones actualmente están fuera de la realidad.
Estas dos décadas en que los alumnos han vivido sus primeros años de enseñanza en barracones, estará siempre en el recuerdo y en la historia personal de cada alumno. Cuando tenga que trasmitir su experiencia escolar siempre saldrán a relucir los años de barracones, son imágenes que se quedan grabadas porque 10 o 12 años de barracones no suele entran dentro del cuento aquel de provisionalidad hasta cubrir unas necesidades, como si se tratase de una emergencia.
La zona nueva de la ciudad, donde se está construyendo el nuevo colegio, da la impresión de estar dedicada en parte al Cardenal Vicente Enrique i Tarancón, la avenida que une la carretera del Puerto y la del Grau, donde está ubicada la escultura del Cardenal, dicha avenida lleva también el nombre de tal insigne borrianense, ahora el nombre del Cardenal estará también en el nuevo colegio. Sin embargo, el museo cuya obra está terminada y en la cual se piensa ubicar el museo del Cardenal, lleva más de 10 años esperando que abra sus puertas, posiblemente porque este local está en el centro de la ciudad y al lado de la iglesia mayor de esta población.
