La dirección del Consorcio Hospitalario Provincial de Castelló se enfrenta a un cúmulo de denuncias a raíz de la modificación de plantilla y de la relación del puestos de trabajo aprobada el pasado martes en el Consejo de Gobierno mediante el voto de calidad de la consellera de Sanidad, Carmen Montón.
El 6 de marzo de 2014, el consorcio nombraba como gerente a Rafael Arce, lo que ponía fin a una etapa de 10 años al frente del centro de Nicolás Martínez Tornero. Este nombramiento culminaba el cambio en la dirección del Hospital Provincial que se había iniciado en el otoño de 2013 y que supuso también la renuncia como director económico de Miguel Llorens, aunque continúa en el centro como funcionario y ocupando su plaza como administrador general.
La nueva dirección del hospital afrontó el conflicto laboral derivado de la concatenación de contratos temporales y en poco más de seis meses el gerente Rafael Arce participó en hasta ocho tribunales de arbitraje.
En relación a estos contratos, las partes, es decir, sindicatos y dirección, acudieron al Tribunal de Arbitraje Laboral de la Comunidad Valenciana que emitió un laudo el 20 de mayo de 2014 por el que ordenaba al centro a que estructurara la plantilla. Esta decisión, aplazada desde 2014, es a la que se ha enfrentado ahora la nueva dirección. No obstante, la tardanza en abordarla, la premura en los plazos y la falta de negociación pueden acarrear un goteo de denuncias en los juzgados.
Por el momento, seis trabajadores han obtenido una sentencia favorable que le ha reconocido sus derechos laborales y la transformación de su contrato en laboral indefinido no fijo, que pone fin al fraude de ley que supone la concatenación de contratos temporales por acumulación de tareas.
En este sentido, desde la dirección del centro reconocieron a Levante de Castelló que el juzgado les ha notificado otras seis denuncias por este motivo y que se encuentran en diferentes estadios de la tramitación judicial. Estos últimos podrán apelar a la jurisprudencia creada por la sentencia ya conocida de un técnico de administración general y solicitar que sean reconocidos sus derechos laborales.
No obstante, este reconocimiento no significa que automáticamente se crea una plaza para el trabajador, sino que se reconocen los derechos laborales acumulados y se transforma el contrato temporal en laboral indefinido no fijo.
Por otro lado, la dirección del Hospital Provincial deberá afrontar también las denuncias por despido improcedente que tienen pensado plantear las personas que el próximo 9 de noviembre terminan su contrato y no siguen en el centro.
Según los sindicatos, las 17 personas despedidas ya han iniciado los trámites con los correspondientes letrados, ya sea mediante los sindicatos, ya sea por la vía privada, con la intención de presentar una reclamación en el juzgado para incoar un posible despido improcedente.
