El Partido Socialista y Compromís votaron en contra de la privatización del recinto ferial en 2005, cuando se encontraban en al oposición. El ejecutivo municipal de entonces, del PP, impulsó la privatización de la nueva sede del mercado del lunes y las ferias, que se estrenó en 2007. Los populares aprobaron la adjudicación a una sociedad creada para llevar el Recinte Firal por un plazo de 50 años, mientras PSPV y Compromís (Bloc en ese momento) alertaron de problemas económicos con este modelo. Ahora queda descartado un posible rescate por la importante indemnización que correspondería a las arcas municipales.