Hace 50 años en una Almassora en pleno desarrollo y crecimiento, la Iglesia Diocesana, atenta a las nuevas situaciones de personas y familias que venían de otros pueblos y que se establecieron en el municipio de la Plana Alta, quiso estar presente en esas zonas de expansión.
Así fue como nació, el 27 de noviembre de 1966, la parroquia de San Vicente Ferrer cuyo objetivo principal fue el de estructurar y dar identidad al nuevo barrio en aquella Almassora en expansión.
El párroco de San Vicente Ferrer, Manuel Martín Nebot, recuerda los comienzos del espacio religioso «y se construyó un poco como se pudo». Con el paso del tiempo, la parroquia se convirtió en un punto de encuentro de los fieles de esta zona del municipio y 50 años más tarde sigue siéndolo.
Desde ser un espacio para celebrar misas, bodas o matrimonios, la parroquia acoge a día de hoy multitud de actividades dirigidas a todo tipo de personas.
Un coro parroquial de adultos y otro de jóvenes, catequesis para los niños que van a tomar la Primera Comunión o para la juventud que continúa en Confirmación, o un grupo de Cáritas, forman parte de la actividad de cualquier parroquia, pero San Vicente Ferrer también cuenta con un grupo bíblico «que se reúne cada 15 días», un grupo de lectores o un grupos de personas que llevan a los domicilios la Comunión a las personas que no pueden acudir a misa.
Celebración del 50 aniversario
Una comunidad parroquial que año tras año ha ido creciendo y que ahora, con motivo de su 50 aniversario, quiere celebrar esta fecha con un programa especial de actividades.
Así, después de una mesa redonda que contó con el primer consejo pastoral de la parroquia y de un charla sobre cómo era Almassora hace 50 años, el espacio acoge hoy la jornada principal de la celebración. A las 19 horas habrá una misa y se procederá a la bendición de los nuevos salones parroquiales y tras ello habrá un Vino de honor. Además, durante estos días se puede visitar una exposición fotográfica para ver cómo era la parroquia y el municipio de Almassora hace 50 años y los cambios que ha vivido.
La música también estará presente en el 50 aniversario y el próximo 10 de diciembre habrá un concierto conmemorativo de los 50 años de la primera Navidad en la parroquia y que estará a cargo del coro de adultos de la Escuela de Música «Mestre Agut Manrique» de Almassora, y la directora
Silvia Queralt Gómez.
Con estos actos, Manuel Nebot indica que se quiere transmitir la idea de que «la parroquia es el camino de Dios y que todos tomemos de conciencia de que somos una comunidad viva».
