Varios comercios de Borriana han sufrido en los últimos días diferentes episodios en los que individuos, aún sin identificar, han tratado de llevar a cabo varios atracos, algunos con violencia. Sólo entre el lunes y el martes intentaron atracar una farmacia, un supermercado y un estanco.
Fuentes de la Guardia Civil han informado de que ya existe una investigación en curso para localizar al autor o autores de los hechos, -ya que aún no se sabe si el individuo actúa sólo o acompañado, y que en todos los casos se ha seguido el mismo «modus operandi». Los agentes han comunicado, además, que no se puede saber, de momento, si las armas de fuego son reales o simuladas.
El concejal de Seguridad, Javier Gual, manifestó ayer que Policía y Guardia Civil están trabajando de forma coordinada, y que «se ha activado una campaña de control de los comercios preventiva y de seguridad».
El último de estos incidentes confirmados por la policía se registró durante la tarde del martes, cuando un encapuchado trató de hacerse con el dinero de la recaudación de un estanco a punta de pistola. El establecimiento, situado en la Plaza de la Generalitat estaba a punto de echar el cierre. Al parecer, el hombre llevaba un arma de fuego en una mano y una lata de cerveza en la otra, y exigió a la dependienta que abriese la caja. Ésta se asustó y con sus gritos alertó al resto de trabajadores, que pudieron avisar a las fuerzas de seguridad. Aunque el individuo golpeó el mobiliario no hubo que lamentar daños personales ya que, además, no había clientes en ese momento.
En este caso, las cámaras de seguridad captaron al caco, y estas imágenes han llegado ya a los vecinos a través de la red y los teléfonos móviles.
Lo cierto es que en pocos días se ha creado cierta alerta social, tanto entre los comerciantes, como entre el resto de vecinos, que no dudan en compartir fotos y vídeos de supuestos atracos por las redes sociales.
Falsa alarma
Tanto es así que durante el día de ayer a primera hora de la mañana saltaba la alarma nuevamente. En un principio se creyó que dos individuos estaban intentando atracar otro conocido supermercado, concretamente, situado en el Camino de Onda. Esta vez, no obstante, se ha tratado de una falsa alarma. Los trabajadores de este establecimiento reconocieron a dos habituales de los hurtos de bebidas alcohólicas ya conocidos en la tienda. Al aparecer la Policía Local se armó cierto revuelo entre clientes y curiosos, y rápidamente se sucedieron los comentarios, tanto en la calle, como a través de los grupos de «whatsapp», y es que éste es un tema caliente que está generando inquietud en la localidad.
Los comerciantes también se sienten preocupados, porque, según Eva Llidó, Vicepresidenta de la Federación de Comercio, esto genera inseguridad aunque insta a no perder los nervios, «no tiene que cundir el pánico porque nosotros tenemos que hacer nuestro trabajo bien hecho, y no podemos estar con las puertas cerradas».
