¿Por qué el Ayuntamiento de Benicàssim apuesta tan fuerte por los festivales?
Porque se ha demostrado que los festivales son motor económico, dinamización empresarial y generación de puestos de trabajo. Y esos son los pilares básicos por los que desde el ayuntamiento apostamos cinco años por consolidar los festivales como producto de dinamización y producto turístico y por crear una marca propia como es «Benicàssim, Ciudad de Festivales».
¿Y qué tiene el SanSan Festival para que hayáis decidido incorporarlo al abanico de eventos que ofrece el municipio a lo largo del año?
Vienen cantidad de festivales a Benicàssim con el objetivo de asentarse y, a la hora de decantarnos por una propuesta u otra, valoramos la calidad del evento, en este caso la calidad musical, el público al que va destinado y sobre todo las fechas y que sea sostenible con el propio municipio. Nosotros no queremos morir de éxito con los festivales, por lo que todo no cabe, y en épocas determinadas no nos cabría todo.
Una de las apuestas que hemos hecho por el SanSan es porque nos gusta el tipo de música nos gusta el tipo de público, no es un festival que nace de la inexperiencia sino que ya lleva una trayectoria, que viene ya con unos avales importantes y lo único que ha necesitado es buscar un territorio donde asentarse y qué mejor que Benicàssim, un municipio que a ellos les aporta la calidad de una marca propia de festivales.
Y lo que pesa sobre todo son las fechas, Semana Santa. Una época que, si bien la ocupación turística que hemos tenido los últimos años ha estado rondando el 80%, todavía queda un 20% de plazas hoteleras por cubrir, y mientras exista una sola oportunidad para poder llegar al 100% de la ocupación no debemos desperdiciarla por parte del ayuntamiento. De ahí que se haya estudiado positivamente la propuesta del SanSan.
Es un festival que podemos sostener por las fechas y que va creciendo poco a poco y nos permite que sea sostenible con los servicios que Benicàssim puede ofrecer en Semana Santa.
Por lo tanto, las procesiones de Semana Santa y el festival son compatibles
Después de estudiar el festival, vimos que mantenía los estándares de calidad que queríamos para el municipio y vimos que se podían incorporar perfectamente dentro de la idiosincrasia del municipio, que también tiene su turismo familiar, residencial, su incremento poblacional en fechas determinadas, les dijimos que lo íbamos a estudiar.
Este festival congregará a unas 10.000 o 12.000 diarias con lo que el impacto lo podemos asumir en esas fechas. Además, por el espacio que ellos necesitan para la zona de acampada, encaja perfectamente en la zona de Teresetes, y ello nos da la seguridad de que, la gente que vaya a venir al festival, o bien ocuparán ese 20% de plazas hoteleras que todavía quedan pendientes de cubrir o bien están en una zona del casco urbano muy próxima y ello nos da mucha tranquilidad a la hora de apostar por el festival.
Un festival por el que desde un principio queréis tener el apoyo de los grupos políticos y de los empresarios locales.
Un festival tiene que contar con el beneplácito, si no con todos, con la mayoría de los grupos políticos, porque si viene tiene que venir a quedarse. Los festivales no los vivimos como una cuestión política. Lo vivimos como evento de ciudad. El FIB llegó con Francesc Colomer como alcalde y si no hubiera sido porque después llegaron unas legislaturas que continuaron apoyando el festival,el FIB no hubiera crecido. Con el Rototom pasó lo mismo.
Con los empresarios, desde el principio el SanSan va a buscar su colaboración e implicación.
Después de la incorporación del SanSan ¿se estudia alguna otra propuesta que se añada al abanico de eventos?
Benicàssim tiene que sostener los proyectos que van llegando. No podemos desbordar el municipio por un festival en un momento. Todo tiene que ser sostenible y la idea es que los eventos ayuden a la desestacionalización.
La mayoría de los festivales que quieren asentarse quieren hacerlo en verano y esa parcela ya la tenemos cubierta.
