El joven delantero Akale Mukwelle resucitó al Villarreal C en el campo del Torrevieja con un gol en el minuto 92 que le dio la victoria al conjunto de la Plana Baixa. Un triunfo agónico porque dos minutos antes el conjunto salinero tuvo el 2-1 en un tiro de Hugo Salamanca al palo y el rechace empalado por Pastor al larguero. El trabajo de equipo y el saber sufrir en los veinte últimos minutos le permitieron al segundo filial traerse tres puntos de oro.

El primer tiempo estuvo bien disputado por el filial amarillo. El equipo de Carlos Pérez Salvachúa tuvo el control del balón y durante muchos minutos dominó el encuentro. El conjunto salinero, que estaba ocupando plazas de descenso a Preferente, se jugaba mucho en este complicado envite. Era cuestión de puntuar para no alejarse de la salvación. Enfrente un equipo groguet herido por los últimos resultados encajados. Casi todos saldados con derrota.

A pesar de que el Torrevieja salió más animoso y dispuso de un lanzamiento (min. 18) de Matheus que atajó bien Diego Fuoli, después llegaron las ocasiones para el conjunto de la Plana Baixa. Llegadas peligrosas, pero que no fueron mortíferas. A la media hora el rumano Andrei probó suerte, pero su lanzamiento salió alto. Y en el 37 la falta botada por Pablo Álvarez fue cabeceada por el central Pepe Castaño, aunque algo desviado. Así se llegó al final del primer tiempo en el Nelson Mandela.

El segundo tiempo arrancó con un zapatazo del ariete onubense Simón Moreno al que nada pudo hacer el guardameta local Lucas, por lo que el balón acabó besando las mallas de la portería local. Era justo premio al dominio de los amarillos. El problema fue que la alegría duró poco. En una falta lateral botada por Damián, el central Jorge remató al fondo de las mallas y estableció el 1-1. Del posible 2-1 en el minuto 88 se pasó al 1-2 en el 92, con el gol marcado por Akale.