El diseño del puente entre el Raval Universitari y Crèmor nacerá del consenso vecinal. Más allá de imposiciones sobre su funcionalidad, la prioridad del Ayuntamiento de Castelló buscará la aquiescencia de los afectados de ambos distritos para evitar descontentos y complacer al mayor número posible de residentes.
Con esa filosofía, la reunión prevista para el próximo 20 de febrero se antoja clave. Así lo destaca el concejal de Ordenación del Territorio, Rafa Simó, quien se muestra convencido de que la ejecución de la infraestructura contará con el beneplácito de las partes implicadas.
En este sentido, recalca el empeño del consistorio por encontrar un acuerdo con los vecinos, consecuencia de repetidas charlas informativas y de trabajo, celebradas en las últimas semanas. «He estado con vecinos de los alrededores de la carretera de l'Alcora hablando sobre este tema. También con los del Raval Universitari y con la UJI. Se ha hablado y seguiremos hablando, porque una de las cosas que caracterizan este equipo de gobierno es la continua participación ciudadana», explica.
Por ello, advierte que « las decisiones no se toman únicamente desde un despacho por un técnico, ingeniero, abogado o concejal, sino que queremos contar con las opiniones de todos. Queremos que haya un consenso en este tema, porque es importante para los vecinos».
Una plataforma mixta
Simó reconoce que la elección definitiva de modelo de pasarela «no contentará a todo el mundo. Evidentemente, cuando tomas una decisión de este tipo, siempre habrá gente a la que le gustará y otra a la que no».
Aunque todavía no hay nada decidido respecto al diseño, la opción del puente mixto, combinando el uso peatonal con el rodado, parece la más lógica. No sólo por la tranquilidad que ello daría a los vecinos del Raval Universitari, desterrando la idea de vial rápido. También por la polivalencia de la viaducto, permitiendo el paso tanto de vehículos como de viandantes, mejorando ostensiblemente la conexión entre los barrios afectados.
Cabe recordar que, para construir el puente, el ayuntamiento ha adquirido una parcela de 4.700 metros cuadrados (440.000 euros de inversión), localizada entre la carretera de l'Alcora y el cauce del río Seco, en la confluencia con la cuadra del Saboner. Esta nueva infraestructura por el sureste sobre el cauce está contemplado en las previsiones de las ordenanzas transitorias de Urbanismo.
El futuro Plan General, ahora en fase previa de redacción, igualmente recoge la novedosa conexión de la ciudad.
Así las cosas, la reunión con los vecinos del 20 de febrero se celebrará en el colegio Jaime I a las 18.00 horas. Los afectados podrán trasladar sus propuestas al área de Urbanismo para concretar el desarrollo de la plataforma.
