Las persistentes lluvias de las últimas 24 horas han hecho aumentar considerablemente el caudal del río Mijares desde el embalse de Sitjar hasta la desembocadura. El río ha experimentado una importante crecida a lo largo de todo el Paisaje Protegido de la Desembocadura ubicado entre las poblaciones castellonenses de Vila-real, Almassora y Borriana, según ha informado el Consorcio Río Mijares en un comunicado.

El Mijares desde primera hora de la mañana superaba el azud de Vila-real o también conocido como los machos. Así mismo el agua saltaba los muros de contención del pantano de Santa Quiteria. Aguas abajo del pantano la Policía Local de Almassora ha tenido que cortar al tráfico la carretera local que atraviesa el punto de confluencia entre el río Mijares y la rambla de la Viuda.

Delante de la ermita de Santa Quiteria de Almassora el puente que atraviesa el río y une Vila-real con Almassora parecía una enorme fuente gigante con multitud de grifos. El motivo ha sido que en el puente de Santa Quiteria ha ido acumulándose toda el agua que había por los alrededores de la ermita.

Otra de las consecuencias de la crecida del Mijares se ha comprobado en la desembocadura tocando el mar. De nuevo la gola sur de Burriana se ha vuelto a abrir porque estaba en proceso de cierre natural debido a los temporales marítimos de levante.