El proceso participativo sobre el Plan General de Castelló analizó ayer la zona Este de la ciudad, delimitada entre la avenida del Mar, la avenida Casalduch y la ronda Este. Una de las propuestas del nuevo planeamiento urbanístico plantea un cambio en el trazado de la avenida Fernando el Católico, eliminando la curva a la altura de la plaza de Cruz Roja, continuando su trazado en línea recta hasta encontrar la avenida Chatellerault de nueva apertura.

La reunión contó con la participación de la alcaldesa de Castelló, Amparo Marco, vecina del distrito; de la vicealcaldesa, Ali Brancal; del concejal de Ordenación del Territorio, Rafa Simó; de la concejala de Gente Mayor, Mari Carmen Ribera y del edil de Transparencia, Ignasi Garcia.

El coordinador del área de Desarrollo de la Ciudad, Fernando Calduch, y la jefa de Planeamiento Urbanístico, Consuelo Leal, fueron los encargados de detallar la ordenación de partida que se plantea para la zona. Además del cambio en el sistema viario con el nuevo trazado para la calle Fernando el Católico, que implicaría un cambio en la disposición de rotondas de la avenida Chatellerault, y la prolongación de la calle Carcagente hasta conectar con el vial de servicio de la ronda de circunvalación, también se han abordado las dotaciones públicas, las zonas verdes, las zonas edificadas y las zonas de nueva urbanización.

Esta reunión contó con la participación de representantes de muchas asociaciones vecinales del barrio, así como del Colectivo «Castelló en bici», los cuales han agradecido al equipo de gobierno la oportunidad de poder aportar sus ideas de mejora del distrito. Así pues, muchas de las aportaciones de los vecinos se han centrado en la mejora de los espacios verdes y de ocio del barrio como placetas o parques, así como también la rehabilitación de algunas aceras. El concejal de infraestructuras, Rafa Simó, ha explicado que tienen la intención de mejorar los espacios de ocio ya existentes y arreglar aquellas calles más antiguas que en estos momentos tienen desperfectos. Simó ha destacado el Parque Geólogo José Royo como espacio verde principal del barrio.

En este sentido, los vecinos han animado al ayuntamiento a que rehabiliten la gran zona verde proyectada entre el Palau de la Festa y el colegio Blasco Ibáñez y lo conviertan en un espacio de ocio para todos los habitantes de la ciudad. Los técnicos estudiarán la idea, pues se trata de una zona de casi 120.000 metros que se habría de reestructurar por partes.

Por otro lado, dentro de este barrio se encuentra una de las zonas de ocio más importantes de la ciudad. Los vecinos han explicado a los técnicos los problemas de suciedad y contaminación acústica que sufren aquellos que viven en la calle Lagasca y alrededores. Así, el equipo de gobierno ha asegurado que seguirán trabajando para crear una zona de ocio con menos ruidos y suciedad.

En cuanto a dotaciones públicas, Rafa Simó ha animado a participar en la encuesta ciudadana para definir el uso del solar del antiguo Mercado del Lunes, que ahora se utiliza como aparcamiento público gratuito. También se pregunta por las necesidades de equipamiento en el barrio, por la existencia o no de itinerarios seguros para acudir a los colegios de la zona, por los equipamientos o por los servicios de parques como el Geólogo Royo o el paseo Río Nilo.

Carril bici hacia Almassora

El futuro Plan General mantiene la gran zona verde proyectada entre el Palau de la Festa y el colegio Blasco Ibáñez, con una superficie de casi 120.000 metros cuadrados y reserva 6.000 metros cuadrados de suelo dotacional detrás del centro de salud Fernando el Católico. Estas zonas verdes se complementan con los ejes para potenciar la accesibilidad ciclista y peatonal en la ronda de circunvalación, el bulevar y zona verde de Censal y las avenidas Chatellerault y Casalduch, «donde destacamos los objetivos del Plan Director de la Bicicleta que propone conseguir la continuidad del eje Norte-Sur a través de todo el término municipal, habilitando un carril bici que conecte el centro de la ciudad hasta su conexión con Almassora».

Las nuevas zonas de suelo residencial urbanizable se redistribuyen respecto a las planteadas en el PGOU de 2000, suprimiendo un sector que se delimitaba al borde de la ronda de circunvalación y delimitando una nueva pastilla residencial de tipología de baja intensidad entre la avenida Chatellerault, la plaza del Cometa Halley y la futura zona verde